¿Sirve o no sirve el cubrebocas para evitar contraer coronavirus? ¿Qué cubrebocas es recomendable utilizar? ¿Es mejor un cubrebocas N95 o uno de tela?
Estas son algunas de las preguntas más recurrentes entre la ciudadanía ante la proximidad de la fase 3 de transmisión del COVID-19, y aquí queremos ayudarte a resolver tus dudas.
A nivel internacional, existe un debate acerca de la eficacia del uso del cubrebocas y, en México, las autoridades sanitarias han manifestado que su portación no garantiza evitar contagios. Hasta hace algunas semanas, la principal recomendación era el adecuado y frecuente lavado de manos, así como el uso de gel antibacterial. Sin embargo, hacer obligatorio el uso del cubrebocas ha tomado fuerza en al menos siete estados de la República, así como en el Metro de la CDMX.
"A 10 pesos lleve su cubrebocas", ofrecen esta protección los vendedores instalados afuera de las estaciones. Pero, ¿sirven estas prendas?
El vocero de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus de la UNAM, Mauricio Rodríguez Álvarez, dice que sí es recomendable utilizar un cubrebocas para evitar la adquisición o propagación del coronavirus, que hasta este lunes ha contagiado a 8,772 personas y causado la muerte de 712.
"Cada vez hay más evidencia que apunta a que sería conveniente generalizar el uso de cubrebocas, sobre todo en personas que estén en lugares públicos, en transporte público, en situaciones de riesgo mayor. Lo conveniente es que utilicen un cubrebocas convencional, hecho de tela, hecho en casa, y que básicamente tendría una finalidad de evitar tocarse la cara, evitar estar escupiendo o echando saliva o moco", explica.
El académico refiere que la gente puede fabricar varios con tela de algodón y colocarles dos capas, que cubran de la nariz a la boca. En su opinión, si quien lo va a utilizar solo caminará por la calle o tomará el transporte público, debe recurrir a un cubrebcas, pero no necesariamente a uno industrial, porque ello genera demanda y dificultad de que sea adquirido para médicos y enfermeras que atienden a pacientes.
De acuerdo con Rodríguez, el uso de cubrebocas es una medida adicional, no una que sustituya a otras de efectividad demostrada, como no salir de casa o mantener distancia.
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El también profesor de la Facultad de Medicina de la UNAM compartió algunas recomendaciones para el uso de cubrebocas:
No es necesario un N95. Rodríguez explica que la disyuntiva de varias autoridades para hacer obligatorio el uso de cubrebocas se centra en que la gente podría solo buscar los N95, destinados a personal médico.
"Corremos el riesgo de que la gente se vaya a poner cubrebocas de uso exclusivo para los hospitales, porque podría pasar que de pronto todo mundo empezaría a jalar cubrebocas del mercado a la calle, se van a acabar y en los hospitales no van a poder utilizarlos porque no habrá", advierte.
De uso personal. Sea cual sea el cubrebocas a utilizar, se debe recordar que es de uso personal; de lo contrario, aumenta el riesgo de contagiar a familiares o a gente cercana.
"Son como una prenda íntima que no la andas cambiando, prestando, y solo la usa una persona", menciona como ejemplo.
De dos capas. Los cubrebocas pueden ser fabricados por los ciudadanos. Basta recortar tela de algodón con una medida de 20 centímetros x 15, para adultos, y de 18 x 12, para niños. Lo ideal es que cuente con dos capas de tela y que cubra la nariz, la boca y las mejillas.
¿Cómo retirar un cubrebocas? El experto explica que para retirarse el cubrebocas es necesario hacerlo por las correas, nunca tocando el rectángulo de tela; de lo contrario, la persona podría tener un contacto directo con el virus que llegara a alojarse ahí.
Lavado frecuente. Si se opta por adquirir un cubrebocas reutilizable, es necesario que después de algunas horas de uso sea lavado con agua y jabón. No hay que reutilizarlo si está sucio. Por ello, se recomienda tener varias piezas para cambiarlas.
Los cubrebocas azules sirven, pero son desechables. De acuerdo con el investigador, los cubrebocas azules, los más comunes, tienen una vida útil de unas cuantas horas; por ello, si se va a salir a la tienda o incluso a caminar por la calle, basta con uno de estos. Sin embargo, si la persona necesitará protegerse por varias horas o se trata de alguien que suda o escupe mucho cuando habla, deberá emplear más de uno.
El uso de cubrebocas es indispensable, sobre todo, si presentas síntomas o cuidas a una persona con #COVID19 😷
— Gobierno CDMX (@GobCDMX) April 20, 2020
Recuerda que, a partir del 17 de abril, es obligatorio portarlo en el @MetroCDMX 🚈#QuédateEnCasaCDMX🏡 #SalvaVidas ❤️ pic.twitter.com/SDADTD7dPL
No relajar medidas. Usar cubrebocas no es sinónimo de estar 100% protegido del coronavirus. Por ello, el académico recomienda no relajar otras medidas, como el lavado de manos, el saludo de etiqueta y mantener la sana distancia.
"El riesgo que se corre, y es lo que están advirtiendo todas las autoridades, es que si te pones el cubrebocas, podrías estar en riesgo de relajar las otras medidas de precaución. Si te pones el cubrebocas y entonces te despreocupas, agarras las superficies de uso común, no te lavas las manos y aumentas el riesgo de contagio", dice.
¿Cómo tirar un cubrebocas? Si se hizo uso de un cubrebocas desechable, al terminar de usarlo se debe meter en una bolsa o envolver en algún papel para tirarlo en la basura, y así evitar el riesgo de propagar el virus con quienes se encargan de la recolección de desechos. "Tiene que quedar bien cerrado para evitar riesgos", señala.
