La Secretaría de Salud informó que ya suman 367 casos positivos y cuatro muertes por COVID-19 en México.
Además de los casos confirmados existen 826 sospechosos de estar enfermos de la nueva cepa de coronavirus y 1,865 fueron descartados, detalló Hugo López-Gattel, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
Previamente, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, informó que una de las personas que murió era un hombre de 55 años que padecía diabetes y obesidad que perdió la vida en la clínica 110 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicada en Guadalajara.
Mientras que el funcionario federal detalló que el otro era un hombre que murió en la Ciudad de México, de 71 años y que padecía diabetes e insuficiencia renal.
López-Gattel también dio a conocer una nueva medición sobre los casos positivos en la que se detalló que 292 son casos importados del extranjero (80%), otros 70 están relacionados a estos (19%) y de cinco no se ha logrado identificar su origen (1%).
La cifra de casos positivos son 51 más con respecto al corte dado a conocer este domingo, cuando se reportaron 316.
México inició su Jornada Nacional de Sana Distancia este lunes con el fin de reducir los contagios del nuevo coronavirus mientras que el secretario de Salud federal, Jorge Alcocer Varela, negó que se estén escondiendo casos confirmados.
El presidente Andrés Manuel López Obrador informó en un mensaje que dará a conocer este martes el plan para proteger a la población vulnerable ante el coronavirus.
Este mismo día varios estados anunciaron medidas más duras para hacerle frente. En el caso de Jalisco se anunció que se harán pruebas rápidas para detectar el COVID-19 y solicitó a las autoridades federales que restrinjan la llegada de los vuelos procedentes de ciudadades y países en los que se ha decretado un cerco sanitario.
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En el Estado de México se anunció que se deberán cerrar todos los negocios de la entidad –a excepción de los relacionados a la venta de alimentos y medicamentos–, así como los lugares de esparcimiento y guarderías.
Mientras que en Quintana Roo se llamó al cierre de casinos, bares, discotecas, cines, plazas comerciales, espacios de culto religioso, entre otros.
