La central obrera de Pedro Haces Barba 'muestra músculo' y ofrece lealtad a AMLO

En este congreso se vio, entre otros, al exaspirante presidencial Armando Ríos Piter, a la conductora Laura Bozzo, al empresario Rafael Herrerías, al luchador El Hijo del Santo, a la actriz y conductora Yolanda Andrade, al obispo Onésimo Cepeda, al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, y el presidente municipal de Huixquilucan, Enrique Vargas.

En la mesa de invitados especiales lo mismo se podía ver a morenistas, priistas o panistas. El centro fue el espacio designado para el invitado de honor: el presidente López Obrador.

A su derecha se situó el dirigente Pedro Haces Barba, y a su izquierda, el senador Ricardo Monreal. El primero no solo es el secretario general de la CATEM; también es el impulsor de un nuevo partido político: Fuerza Social por México. Además, hubo lugar para la excandidata presidencial Josefina Vázquez Mota, para la secretaria del Trabajo, Luisa Alcalde, para el presidente de la Concamin, Francisco Cervantes, y para el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat.

Poco después del mediodía, Haces Barba llamó a los trabajadores a no reaccionar con miedo o titubeos ante el nuevo rumbo del país, bajo el liderazgo de López Obrador.

El también suplente del senador Germán Martínez Cázares fue más allá y ofreció al presidente ser un aliado de su proyecto de transformación.

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El morenista aseguró que hoy se requiere de un sindicalismo que responda a las necesidades de los trabajadores, pero también que mantenga una buena relación con los empresarios, porque son los empleadores del país.

"Rechazamos tajantemente los paros injustificados, rechazamos las extorsiones a los empresarios, rechazamos las amenazas a huelga, y rechazamos todas esas malas prácticas que ya no caben en el sindicalismo moderno mexicano. Tenemos que dejar atrás los lastres que tanto daño le han hecho a México", dijo.

Entre gritos y aplausos, el presidente López Obrador tomó la palabra. Si bien por la mañana aseguró que su gobierno no tiene sindicatos ni organizaciones predilectas, el mandatario fue el protagonista de este congreso.

Contrario a su rechazo a acudir a eventos del sindicato minero, liderado por Napoleón Gómez Urrutia, López Obrador aceptó ser el invitado especial de la CATEM.

El mandatario aseguró que su gobierno siempre apoyará el sindicalismo mexicano y reconoció la lucha que ha encabezado en la historia de México.

También dijo que, así como Benito Juárez separó la Iglesia del Estado, la "cuarta transformación" está separando el poder económico del político, por lo que agradeció a los empresarios de México por comprender "estos nuevos tiempos y la necesidad de reacomodos".

Aseguró que en 14 meses se han conseguido logros para el ámbito laboral, como un aumento al salario en 35%, por consenso entre empresarios, gobierno y líderes sindicales, y se aprobó una nueva legislación en la que se establece que debe haber democracia en los sindicatos.

El presidente planteó que su gobierno está emprendiendo tres acciones más: limpiar de corrupción el Infonavit, mejorar los servicios de salud y enfrentar los problemas con las pensiones.

Sobre el primero, destacó que, así como en todo su gobierno se está combatiendo la corrupción, quedan prohibidos los desalojos y a quienes pagaron 90% de sus créditos se les condonará el 10% de su deuda.

Acerca del segundo eje, dijo que es un compromiso otorgar servicios de salud de calidad a través del IMSS.

Y sobre el tercer eje, señaló que buscará una salida con los empresarios y con los sindicatos para que los trabajadores reciban lo que les corresponde de sus pensiones y no solo el 30% o 40% de lo que ahorraron.

"Vamos a buscar una salida con empresarios y con sindicatos para que los trabajadores reciban lo que por justicia les corresponde en cuanto a sus pensiones. Ese es otro compromiso de mi gobierno. No le vamos a fallar al pueblo de México, no le vamos a fallar a los trabajadores de México", sostuvo.