Además, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) también anunció que analizaría la autorización de la construcción, emitida el 7 de diciembre de 2021.
“Esta determinación refleja nuestro firme compromiso con la responsabilidad social, ambiental y empresarial”, informó la compañía a través de un comunicado.
Desde que se aprobó la construcción del cuarto muelle, activistas, habitantes y organizaciones civiles se han opuesto a la obra por considerar que causará graves daños ambientales, especialmente en los arrecifes de coral y en Villa Blanca, la última playa de la isla que se mantiene pública.
A partir de marzo de este año, los activistas incrementaron las protestas con la campaña "No al cuarto muelle", debido a que un juez desechó un amparo que había logrado frenar la obra durante tres años.
Además, vecinos de la isla recolectaron y entregaron a la Semarnat 130,000 firmas de personas en contra del proyecto y han exigido a las autoridades que se realice una consulta pública que permita decidir a la comunidad si se construye o no el cuarto muelle.
La empresa defiende que el cuarto muelle aumentará la derrama económica y generará empleos en Quintana Roo. También asegura que el proyecto cuenta con estudios técnicos, jurídicos y ambientales, además de un plan de mitigación con 21 acciones para proteger los ecosistemas marinos.
Pero los activistas advierten sobre el daño ambiental. Han señalado, además, que la Autorización de Impacto Ambiental que avaló la obra supuestamente contiene información falsa.
Mientras las autoridades revisan la obra y toman decisiones, la empresa Muelles del Caribe apuesta a consolidar el proyecto y a llevarlo a cabo después de la suspensión temporal.
“Esta pausa representa una oportunidad para reforzar las medidas ambientales y atender las preocupaciones de algunos sectores de la comunidad cozumeleña, con el fin de que este proyecto cumpla plenamente su objetivo de generar beneficios sostenibles y de largo plazo para el crecimiento regional”, reconoció la compañía.
También aseguró que estará abierta al diálogo con la sociedad civil, los habitantes y las autoridades municipales, estatales y federales.
“Confiamos firmemente en que, mediante la suma de esfuerzos y la participación activa de todos los actores involucrados, y con información transparente, oportuna y técnicamente sólida, será posible consolidar un proyecto que contribuya de manera significativa al bienestar social y al desarrollo económico de toda la región”, agregó.