Pedro Legarreta Lores, exdiputado local y quien fungía actualmente como presidente de la Unión Nacional de Padres de Familia de Culiacán, fue asesinado en la capital de Sinaloa, lo que fue condenado por el Partido Acción Nacional (PAN) y militantes de este partido en la entidad.
Según los primeros reportes, el también miembro de la organización Ciudadanos Construyendo la Paz murió tras recibir dos impactos de bala al tratar de resistirse a un intento de robo de vehículo en su propio domicilio.
La Secretaría de Seguridad Pública informó que la víctima sufrió heridas de bala en pierna y glúteo. Aunque recibió asistencia de Cruz Roja y luego fue trasladado al hospital, el exlegislador local falleció la mañana del jueves.
Las organizaciones Laicos Servidores de la Palabra y Vía Familia condenaron este hecho y exigen a las autoridades del estado un alto a lo que llaman estado de sitio en el que se vive en Sinaloa por "su incapacidad de darnos seguridad y certeza ciudadana".
“Estamos de luto en el Partido Acción Nacional. Pedro era un compañero de bien, un amigo, y no merecía morir así. Exigimos justicia y acciones concretas para frenar la violencia y los robos en Culiacán,” expresó también la presidenta del PAN en Sinaloa, Roxana Rubio Valdez.
El asesinato de Legarreta Lores se registró en el mismo día en que en Culiacán se llevó a cabo el evento "Jalemos con Banda", organizado por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) de Culiacán y el chef Miguel Taniyama, con el propósito de reunir fondos en beneficio de músicos informales e independientes, así como meseros de los restaurantes afectados por los dos meses y medio de crisis a causa de la inseguridad en Sinaloa.
Dicho evento se realizó en la emblemática avenida Álvaro Obregón, en pleno centro de Culiacán, donde más de cien integrantes de bandas musicales tocaron al ritmo de la tambora, clarinetes y trompetas para amenizar la preparación y venta de una tonelada de aguachile, tacos y botanas.
Los crímenes y violencia que sacude a Sinaloa, y que suma más de 200 muertes, se desató tras el arresto del narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, el pasado 25 de julio en Nuevo México, Estados Unidos.
El líder del Cártel de Sinaloa, de 76 años, fue detenido junto con Joaquín Guzmán López, hijo del capo Joaquín "El Chapo" Guzmán. Desde entonces, las balaceras, los enfrentamientos armados y la violencia no han cesado en la entidad.
De acuerdo con el reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), publicado este jueves, Sinaloa, entidad gobernada por el morenista Ruben Rocha Moya, se ubica en la tercera posición de los estados del país con mayor número de homicidios durante octubre (182), por debajo de Guanajuato (320) y Guerrero (204).
