Uno de los cadáveres, dijo la fiscalía, estaba "en el interior del panteón 21 de Marzo (en Sinaloa), mientras que el resto estaban en carreteras, un puente y otros sitios.
Sinaloa, cuna de grandes capos de la droga en México, muchos de ellos detenidos en México o extraditados a Estados Unidos, ha vivido en los últimos meses fuertes enfrentamientos entre bandas criminales.
El Gobierno ha enviado a miles de soldados a la zona sin que hasta ahora haya tenido éxito con el objetivo de lograr la paz.
En la víspera, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó sobre el arribo otros 100 efectivos de fuerzas especiales del Ejército desplegados en Sinaloa para combatir a grupos criminales que operan en la región.
Desde el 9 de septiembre, cuando se tiene registro de un aumento en los choques entre grupos criminales antagónicos que pelean las rutas para traficar droga en Sinaloa, hasta la fecha, autoridades han reportado al rededor de 400 homicidios y otros cientos de desaparecidos.
El miércoles, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, criticó a la anterior administración del presidente Andrés Manuel López Obrador por ser demasiado indulgente con el crimen y defender una estrategia contra el crimen organizado de "abrazos, no balazos".
Más temprano el jueves, la presidenta Claudia Sheinbaum dijo que su Gobierno había enviado una "nota diplomática" a la embajada estadounidense en respuesta a Salazar y aseguró que su gobierno seguiría manteniendo una estrecha coordinación en materia de seguridad con Estados Unidos.