Tras el deslave que se registró desde la mañana del sábado 26 de octubre sobre la autopista Orizaba-Puebla y que provocó largas filas de vehículos que pretendían circular por la vía de comunicación entre ambas ciudades, permanece la duda sobre si ya fue reabierta la circulación.
El deslave de tierra afectó a dos pipas de carga y una de ellas quedó muy cerca de un restaurante; sin embargo, no hay personas heridas tras el accidente.