El plan para reforzar la seguridad en Sinaloa, tras una ola de hechos violentos que se han registrado en la entidad luego de la detención de Ismael "El Mayo" Zambada, ha crecido en las últimas semanas.
En al menos un mes, más de un millar de elementos tanto de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional se han sumado a esta estrategia iniciada por Andrés Manuel López Obrador y seguida por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y su equipo de seguridad.
El gobernador Rubén Rocha Moya indicó que la llegada de las fuerzas federales responde a los compromisos realizados con el secretario de la Defensa Nacional, general Ricardo Trevilla Trejo, y el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
Estos compromisos incluyen la asignación de una compañía de fuerzas especiales, de los cuales 312 ya estaban en la entidad y vehículos blindados “para combatir a la delincuencia”.
“Estos compromisos y acciones, nos permiten reforzar nuestro operativo para brindarle seguridad y confianza a la ciudadanía para desarrollar sus actividades cotidianas con tranquilidad”, publicó el gobernador en su cuenta de X.
Asimismo anunció que 300 elementos adicionales de la Guardia Nacional "están en camino para fortalecer las labores de proximidad y acciones preventivas en Culiacán".
El pasado 21 de septiembre anunció que habían arribado a la capital, dos batallones, un total de 600 elementos del ejército, que se sumaban al operativo de seguridad activo, "con el objetivo de reforzar la estrategia coordinada entre los tres órdenes de gobierno para combatir la inseguridad en el estado".
Solo a Culiacán, llegaron 200 elementos de seguridad federales. "Estos elementos se suman a las tareas de prevención que se realizan con los demás efectivos que han llegado a la capital, para tener una mayor cobertura en distintos puntos en coordinación con Policías Estatales", informó la Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa.
La detención de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, señalado por las autoridades mexicanas y de Estados Unidos de haber sido uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, ha derivado en una crisis de violencia en la entidad.
Culiacán, la capital del estado, que ha quedado en medio del enfrentamiento entre presuntos integrantes de los grupos de ‘Los Chapitos’ y ‘Los Mayitos’, escisiones del Cártel de Sinaloa. Tan solo este 10 de octubre se reportó la muerte de seis personas.
Una de las muertes fue la de un hombre que circulaba por la carretera El Dorado-Las Arenitas, cuando se encontró con costales que obstruían en paso e intentó retirarlos ocurrió una explosión. Otro de los asesinatos fue el de un hombre encontrado a un costado de la carretera Culiacán-El Dorado, con las manos esposadas en la espalda y una cuerda atada al cuello.
Los hechos ocurrieron días después de que el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, acudió a la entidad e hizo recorridos por la entidad y delinearon la estrategia para Sinaloa, que incluye los siguientes ejes:
Las autoridades acordaron reforzar los operativos en el estado, con el propósito de brindar tranquilidad a la ciudadanía y reforzar la seguridad, y que, tanto empresarios como sus trabajadores puedan desarrollar sus actividades con normalidad, así como dar garantía para que los eventos masivos o celebraciones se puedan realizar a sabiendas de que existirá más cercanía de la Policía y de la Guardia Nacional.
Apenas este sábado, miles de personas se congregaron para un partido de béisbol, del equipo local: Los Tomateros, en donde destacó también la presencia de la Sedena, pero en botarga.
En tanto el gobernador Rocha destacó que se incrementará la presencia de la Guardia Nacional sobre todo en los alrededores de las escuelas, para que los padres de familia tengan la confianza de enviar a sus hijos a los planteles para retomar las clases presenciales.
