"Desde el primer momento giré instrucciones a mi gobierno de brindar toda la cooperación a las investigaciones de la Fiscalía General del Estado con el fin de sancionar a los responsables", dijo este jueves el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca.
En conferencia de prensa, el mandatario estatal indicó que la FGE está en comunicación con el gobierno de Guatemala para la realización las pruebas de ADN, pues se cree que al menos 15 de las víctimas son originarias de ese país.
"No habrá impunidad en este caso. La fiscalía del estado estará dando seguimiento a esta investigación. Tamaulipas no es ni será zona libre para el crimen", agregó.
A su vez, desde Palacio Nacional, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, descartó que este caso sea igual a la masacre de San Fernando, también en Tamaulipas, cometida en agosto de 2010 presuntamente por Los Zetas, y cuyas víctimas fueron 72 migrantes centroamericanos.
La diferencia en este caso, destacó Sánchez Cordero, es que hay avances en las investigaciones y que no habrá impunidad.
"Por ningún motivo es igual que lo que sucedió en San Fernando. Todos los días a partir de que sucedió este evento hemos estado en el gabinete de seguridad viendo los avances que se tienen, y te puedo decir, con mucha seguridad que se ha avanzado muchísmo, tenemos mucha información.
"Las investigaciones tienen que llevarse a cabo en la mayor de las secrecías, pero sí te aseguro que no es un San Fernando, porque estamos avanzando en la investigación de manera contundente", enfatizó la secretaria de Gobernación en la conferencia del 27 de enero.