MONTERREY, Nuevo León.— Cientos de migrantes que estaban alojados en la Casa INDI, de la Parroquia Santa María Goretti, en Monterrey, se mantienen en aislamiento luego de que en el lugar se confirmara un brote de COVID-19 en el que hasta ahora 30 personas han dado positivo al nuevo coronavirus.
La situación fue dada a conocer en un comunicado de prensa firmado por el padre Felipe de Jesús Sánchez, fundador y director del albergue.
“Se ha confirmado el contagio por COVID-19 en 30 de los miembros de esta comunidad que formamos Casa INDI”, señala el texto.
“Esta situación nos ha llevado a decidir reservar, por lo pronto, el servicio del Comedor del Padre Infante solo a los huéspedes”, agrega.
La Arquidiócesis de Monterrey confirmó que la Secretaría de Salud de Nuevo León realizó pruebas a los migrantes del lugar. Una de las personas contagiadas es el propio padre Sánchez.
En los siguientes días, la aplicación de pruebas continuará para evitar que el virus siga propagándose, según se indicó.
Al lugar acudió el secretario de Salud estatal, Manuel de la O, mientras el albergue quedó resguardado por la Fuerza Civil.
De la O dijo que algunos migrantes con dificultad respiratoria fueron trasladados para ser atendidos en el Hospital Metropolitano, mientras que el resto se mantiene en aislamiento.
Al respecto, el diputado de MC y presidente de la Comisión de Desarrollo Social, Derechos Humanos y Asuntos Indígenas del Congreso local, Luis Donaldo Colosio Riojas, hizo un llamado para que los migrantes sean atendidos sin ninguna repercusión legal.
El legislador emecista también pidió a las autoridades estatales y municipales que se acerquen a los albergues de Nuevo León para que se garantice la salud de todos los migrantes.
“Es de vital importancia que todas las personas, sin distinción alguna, tengan acceso a los servicios de higiene básicos, para evitar el mayor número de contagios posibles”, dijo.
