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#SusanaVigilancia: Jalisco y Guanajuato adquieren deuda por COVID-19

Estos estados adquirieron deuda por 11,000 mdp en conjunto y solo ellos han hecho públicos los compromisos adquiridos para la recuperación económica, señalaron Transparencia Mexicana y Tojil.
vie 12 junio 2020 04:36 PM
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Para la recuperación económica tras epidemia de COVID-19, Jalisco y Guanajuato han adquirido deudas por más de 11,000 mdp y las han transparentado.

Los gobiernos de Jalisco, encabezado por Enrique Alfaro (MC), y de Guanajuato, por Diego Sinhué (PAN), adquirieron una deuda por 11,720 millones de pesos en conjunto para ayudar a la reactivación y recuperación económica sus estados, en medio de la epidemia de COVID-19.

Por medio del mecanismo de seguimiento, conocido como #SusanaVigilancia que llevan las organizaciones Transparencia Mexicana y Tojil, han detectado que tanto el gobierno federal como los gobiernos estatales han activado mecanismos de deuda pública, créditos, apoyos económicos o estímulos fiscales.

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Y en una primera revisión, señalaro que solo Jalisco y Guanajuato han publicado información sobre los compromisos adquiridos para financiar la recuperación, por 6,200 mdp y 5,350 mdp, respectivamente.

Los gobiernos federal y estatales han anunciado distintos programas de apoyo y créditos para apoyar a los afectados, pero de acuerdo con los organismos de la sociedad civil, solo cuatro gobiernos estatales publican información suficiente para estimar el total de los créditos para empresas en el marco de la emergencia sanitaria, los cuales se estiman en más de 1,500 mdp.

  • Coahuila (800 mdp)
  • Puebla (540 mdp)
  • Sonora por (185 mdp)
  • Zacatecas (70 mdp)

Los estados de Morelos, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz no transparentan en sus micrositios especiales de COVID-19 los programas y apoyos anunciados a través de distintos vías de comunicación, señalan en el comunicado.

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Un riesgo ante las elecciones 2021

Las organizaciones señalaron en un comunicado, que además del buen manejo de los recursos, desconocer el origen, destino y uso de estos programas de apoyo representa un riesgo adicional ante el inicio del periodo electoral 2021, el que será el más grande de la historia y se renovarán 15 gubernaturas y la Cámara de Diputados.

Indicaron que a diferencia de los recursos presupuestarios, estos instrumentos pueden generar obligaciones que trascienden el ejercicio fiscal 2020, en el caso de la deuda –por ejemplo– las obligaciones van más allá de una generación de mexicanas y mexicanos, por eso la importancia de dar seguimiento en el futuro.

Al respecto, Transparencia Mexicana y Tojil señalan indispensable que los gobiernos de las entidades publiquen en sus micrositios COVID-19 el origen y destino de los recursos a implementar en la reactivación y recuperación económica.

“Todo instrumento adquirido para financiar la recuperación económica, incluida la deuda pública, debe ser transparente, tanto en el proceso de aprobación, su negociación con las instituciones crediticias y también en la ejecución de los recursos”, advirtieron.

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