Durante la Fase 3 de la epidemia, México alistó planes de reconversión hospitalaria y diseñó hospitales temporales para atender a los pacientes que requerirían de atención especializada, para que no colapsara el sistema de salud y se saturaran las unidades médicas.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, a nivel nacional se tiene un total de 22,851 camas IRAG (Infecciones Respiratorias Agudas Graves), de las cuales, 14,072 están disponibles y 8,779 (38%) están ocupadas. No obstante, la situación es distinta en cada país.
Las tres entidades que se han convertido en el foco de la infección en el país (CDMX, Edomex y Baja California) son las que menos disponibilidad hospitalaria tienen hasta el momento, aunque en las dos primeras es donde también se han concentrado los esfuerzos para conseguir los insumos necesarios.
En la capital, por ejemplo, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, informó que hasta el viernes pasado había 1,443 personas hospitalizadas no intubadas y 1,090 personas intubadas. Además que se incrementó la capacidad hospitalaria de 4,147 camas de hospitalización general a 4,432, mientras que en el caso de las camas con intubación pasaron de 1,704 a 1,808, aunado a que se recibieron 100 ventiladores más.