La sección local Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) también respondió al anunció de Román y advirtió que esos cierres de establecimientos traerían daños irreparables al comercio y al sector privado.
“El cierre de negocios SIN CONTAR CON UN PLAN ESTRATÉGICO DE CONTINGENCIA golpea de manera irreversible a los empresarios y sus colaboradores, incluso, llegando a la quiebra en muchos casos”, señaló el organismo en un comunicado.
Ante la reacción, la alcaldesa matizó su anuncio previo, emitido la noche del miércoles, y dijo que las medidas son solamente un exhorto que no derivará en multas para quienes no lo atiendan.
“Todavía no vamos a multar a nadie porque no estamos en ese extremo, solo los invitamos a que tomen conciencia, porque está (en juego) la vida de todos nosotros, de nuestras familias. El autoaislamiento es preventivo y voluntario”, señaló en una conferencia de prensa.
“Los exhortamos no a cerrar los lugares, pero sí a disminuir el número de clientes (...) No estamos todavía en las medidas drásticas en este momento para obligar a que no vayan a la playa, lo que pedimos es a la conciencia de la gente”, añadió.
Hasta la noche de este jueves, en México había 164 casos confirmados de COVID-19.