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¡No hay nada qué festejar!, reclaman madres de desaparecidos en Guadalajara

Acompañadas del presidente de la CEDHJ y el cantante Rubén Albarrán, 2,500 personas tomaron las calles de la capital de Jalisco para reclamar la localización de los cineastas y miles de desaparecidos.
sáb 05 mayo 2018 12:17 PM
Cineastas
Cineastas La desaparición y presunto homicidio de Marco, Salomón y Daniel reavivó el reclamo social de Jalisco, uno de los estados con más personas desaparecidas. (Foto: Elizabeth Ortiz.)

Previo al 10 de mayo, madres de desaparecidos y familiares marcharon en silencio en las calles de Guadalajara, en protesta porque ellas no tienen nada qué festejar.

Alrededor de 2,500 personas se unieron a la manifestación para exigir justicia.

El contingente salió de Plaza la República, ubicada en avenida México hacia la Glorieta de las y los desaparecidos, sobre Chapultepec. Entre los asistentes estuvieron el presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Jalisco (CEDHJ), Alfonso Hernández Barrón, y Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba.

A mitad de la marcha, un compacto contingente de estudiantes del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara se unió al grupo. Los jóvenes permanecieron unos minutos en el cruce de Chapultepec y Vallarta con el puño levantado por los desaparecidos.

Al llegar a la glorieta, otro grupo de manifestantes esperaba a las madres con un coro de apoyo: ¡No están solas! ¡No están solas!

¡No están solas!
Universitarios de la UDG y el CAAV marcharon para exigir justicia por los jóvenes cineastas y los más de 600 desaparecidos de 2018 en Jalisco.
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Guadalupe Aguilar, vocera de Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos en Jalisco (Fundej), dijo que en lo que va de 2018 han desaparecido 608 personas, lo equivalente a cinco desapariciones diarias.

“No hay nadie a quién acudir, dada la indolencia e incapacidad de las autoridades, indolencia e incapacidad para encontrar a los nuestros. No hacen lo suficiente y es por eso que estamos aquí, para manifestar este dolor tan grande de no tener nada qué festejar este 10 de mayo, Día de la Madre. Que no tenemos un hijo que nos lleve flores”, se dolió la representante de Fundej.

No te pierdas: Fiscalía de Jalisco gasta más en difundir logros que en buscar a desaparecidos.

“Ese dolor debemos sentirlo todos”, añadió el cantante de Café Tacvba.

“Mandando un buen pensamiento para que podamos cuidarlos, que estén protegidos, que nunca se crucen con nadie que quiera hacerles daño físico, mental, intelectual, moral, que estén todos protegidos todos los jóvenes”, expresó.

Y envió un mensaje a los desaparecidos.

“Mandando nuestro mejor pensamiento para todos los desaparecidos, los acompañamos desde aquí con un buen pensamiento, con un buen rezo, con nuestro corazoncito latiendo por ustedes. Agradeciendo la vida, defendiendo la vida, por ustedes, por los miles de desaparecidos por los miles de afectados de esta guerra que vivimos en nuestro país porque es un país en guerra y nos duele a todos y deseamos sanearlo”.

“Fuerza a todas las madres”, concluyó. Luego cantó Amor Divino, así como el tema 1,2,3.

Ay, amor divino
Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba, participó en la marcha que convocaron madres de desaparecidos en Guadalajara previo al 10 de mayo. 'No tenemos nada qué festejar, reclamaron.

Alumnos de la Universidad de Medios Audiovisuales (CAAV), la escuela de Javier Salomón Aceves Gastélum, Marco Francisco García Ávalos y Jesús Daniel Díaz García, desaparecidos el 19 de marzo, también participaron en la movilización.

“En las escuelas de arte nos enseñan que la imaginación tiene más fuerza que el poder, que para imaginar hay que voltear hacia dentro. Por eso hoy marchamos en silencio, queremos paz, decimos sí al arte, no a la violencia”, expuso un compañero de los cineastas .

Además leyeron un poema de su compañero Eduardo Alvarado:

Qué fácil es desaparecer
No decirle a nadie que te vas (…)
Qué fácil romper una familia en pedazos irremplazables,
Hacer polvo lo que es importante,
Volar el futuro de todo un país,
Andar caminando sin vida con un alma que tiembla de miedo,
Con un miedo que nos hace sentir cada vez menos y menos y menos.

“Quiero que se den cuenta del país asqueroso y enfermo en el que vivimos (…) Para los que están allá arriba en la pirámide no somos nadie, nuestra vida no vale nada, o bien, vale un millón de pesos, así como la recompensa que pidió el gobierno de Jalisco”, lamentó otra de las alumnas del CAAV.

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