Este lunes, en sesión de la Comisión de Vigilancia de la ASF, los diputados federales de Morena rechazaron la petición de llamar a reunión de trabajo a Colmenares para explicar la situación y el nombramiento de Arely Gómez como auditora sustituta de Caso Raphael.
Ricardo Palma Rojas, titular de la UEC, organismo técnico responsable de dar seguimiento a las tareas de la ASF, informó que el 10 de abril pasado abrió una investigación “sobre la supuesta carta” con las denuncias.
“Ya se citó a ciertos funcionarios implicados en esto y de ser el caso habrá sanciones”, dijo el diputado Pablo Guillermo Angulo Briceño, presidente de la Comisión de Vigilancia.
En la sesión solo se trató como asunto general la petición de la diputada María Elena Pérez Jaén y del diputado René Figueroa, quienes pidieron una reunión de trabajo a Colmenares por el cese de Caso Rapahel y la designación de la nueva auditora Arely Gómez.
“El auditor no se manda solo, la ley permite evaluar su desempeño", expuso Pérez-Jaén al advertir que los diputados de Morena son “escuderos” porque –acusó– tienen a familiares en la ASF, como la legisladora Lidia García, quien “incurre en un conflicto de interés pues su hijo trabaja ahí", al igual que el hermano del morenista Ignacio Mier.
En su demanda fue respaldada por la diputada Inés Parra Juárez, de Morena, quien indicó que Colmenares realizó una nueva “purga” pues es un “auditor tapadera” para encubrir la corrupción.