El líder nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, rechazó la supuestas irregularidades denunciadas por Marcelo Ebrard y aseguró que el aspirante no ha entregado “ninguna prueba”.
Delgado minimizó las acusaciones del excanciller, quien la semana pasada advirtió que ha habido un acarreo desmedido, exceso de gastos, uso de recursos públicos y de la estructura de la Secretaría de Bienestar para favorecer a Claudia Sheinbaum.
“Recibimos una carta de la representante de Marcelo Ebrard (Malú Micher) haciendo esta denuncia, pero no fue acompañada de ninguna prueba y hay un reclamo hacia la dirigencia del partido, ellos dicen por omisión en nuestra actuación y la actuación específica es sobre la Secretaría de Bienestar”, explicó.
“Pero está muy claro que nosotros somos el partido político, la Secretaría del Bienestar está dentro del Poder Ejecutivo y pues su jefe es el presidente de la República y el presidente ya dio respuesta a ese señalamiento”, agregó.
Delgado aseguró que no ve "ningún escenario de ruptura”, pues considera que el proceso ha transcurrido sin problemas y la realización de encuestas será clara.
“Desde el partido no vamos a dar ninguna justificación para una posible división “, dijo en conferencia de prensa.
Incluso, vio normal que haya quejas, pues –destacó– el proceso interno para definir al coordinador de los comités de defensa de la "cuarta transformación" “es una contienda real"
"Entonces obviamente hay diferencias, desencuentros, distintas opiniones, pero nada que justifique una ruptura. El proceso se va a llevar a cabo con absoluta transparencia“, apuntó.
Esta es la primera vez que Delgado habla sobre las acusaciones de Ebrard e insistió en que recibió unas cartas “que no contienen ninguna prueba".
“Hay reglas definidas que tienen que respetarse. No puede llevarse a cabo este proceso y si no me gusta el resultado entonces cuestiono las reglas. Las reglas se firmaron antes”, añadió.
El líder del partido guinda también consideró saldado el otro conflicto denunciado por cercanos a Ebrard, en el caso de la selección de las encuestadoras que coadyuvarán al levantamiento de los sondeos de opinión para definir al ganador de la contienda.
Explicó que la redacción exacta de la pregunta que tendrá un valor de 75% en la decisión, referente a la preferencia para coordinar a la cuarta transformación, se conocerá hasta el próximo 27 de agosto.
Ese día o al siguiente, en presencia de las encuestadoras y los representantes de los aspirantes, se auditarán los sistemas para verificar que haya transparencia en la generación de las muestras de ciudadanos que serán encuestados.
Para ello se considerarán secciones rurales, urbanas, mixtas, personas de ambos géneros y de todos los rangos de edad para que sea una muestra representativa de la decisión.
“Estamos listos para arrancar esta etapa y damos todas las garantías a nuestros compañeros de que va a ser absolutamente transparente, profesional y nada ni nadie se interpondrá en la decisión de la gente. Tenemos todo blindado", aseveró.
Además, tendrá candados adicionales: habrá veda a partir del día 28 de agosto, por lo que los aspirantes deberán guardarse. Se aplicarán en total 12,500 cuestionarios entre todas las encuestadoras. También se desestimó las preocupaciones expresadas por el senador con licencia Ricardo Monreal, quien alertó la posibilidad de que alguno de los aspirantes, conociendo la muestra, se promueva en esas secciones electorales para influenciar la decisión.
Las empresas ya firmaron compromiso de confidencialidad, además de que los encuestadores de Morena serán acompañados por representantes de los aspirantes y serán llevados a las secciones electorales a ciegas para no sepan a dónde van.
“No hay posibilidad de conflicto o de que haya dudas de quién ganó este ejercicio“, añadió delgado y descartó que haya empate.
