Reglas de la consulta
“La consulta popular tiene reglas muy específicas. Incluso, como no pueden participar los partidos políticos, no tienen representaciones en las mesas receptoras de opinión como sí las tienen en las casillas que se instalan en una elección. Son de las cuestiones sui generis de este ejercicio”, detalló Ravel Cuevas.
En tal sentido, el instituto es la única autoridad que tiene la potestad de hacer la difusión de este ejercicio en aras de que la gente conozca y acuda a participar.
Y es que la Cámara de Diputados estableció que la convocatoria para la consulta deberá entrar en vigor el 15 de julio, entonces a partir de esa fecha y los tres días antes de que esta se lleve a cabo, el INE podrá hacer la difusión correspondiente.
Además, aplica un “periodo de veda” tres días antes de la consulta, como ocurre en una elección.
“Otra pecularidad es que no se puede hacer en el periodo del 15 de julio hasta el 1 de agosto propaganda gubernamental, salvo las excepciones que establece el artículo 41 constitucional relativo a cuestiones de protección civil, educación y salud”, añadió Ravel.
-¿Andrés Manuel López Obrador tendrá que abstenerse de hablar del tema después del 15 de julio?
Sí, a partir de ese momento empieza formalmente la difusión de la consulta popular por parte del INE y nosotros seremos los únicos que podemos estar invitando a la ciudadanía a participar.
-¿Y, en caso de que incumpla, como en el caso de las elecciones federales intermedias, cuando hubo llamados del INE e incluso el Tribunal Electoral aprobó ciertos criterios, no solo para él sino para todos los funcionarios?
Tendría que operar algo parecido a lo que ocurrió con la Comisión de Quejas y Denuncias en el marco del proceso electoral.
En su caso se puede iniciar procedimiento de oficio o a petición de parte, por cualquier ciudadano podría presentarlo para que hubiera un pronunciamiento por parte de la Comisión de Quejas y Denuncias y, en su caso, haga la valoración para que se puedan dictar medidas cautelares.
La integrante de la Comisión de Organización y Capacitación Electoral, reconoció que el INE está ante un tema francamente novedoso que contará con los mismos estándares de calidad de un proceso electoral.
Además, dada la negativa de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) y de la Cámara de Diputados de otorgarle al INE los recursos para la realización de este ejercicio estimado en 522 millones de pesos, el instituto realiza algunos ahorros y licitaciones.
“Estamos haciendo un ejercicio de ver de dónde sacamos los ahorros y también, al final de cuentas cuando se hacen licitaciones luego se tienen ahorros, justamente porque es lo que están buscando. La licitación se hace para buscar el mejor precio posible”, dijo.
También, por ejemplo, “de algunas vacancias que tenemos pero que no hemos ocupado, hemos visto cómo ahorrar en este ejercicio como es que en lugar de poner todas las casillas como en el proceso, poner menos mesas receptoras de opinión tratando de abarcar un par de secciones y el mayor número de personas posibles.