La reforma se haría al artículo 56 de la Constitución. “Integrarán la Cámara de Senadores los expresidentes de la República que hubiesen sido electos democráticamente o se hayan desempeñado como sustitutos, por un periodo improrrogable de seis años inmediatos a la terminación de su encargo”, dice.
La reforma sólo beneficiaría al presidente actual y a los que sigan, no a los jefes de Estado de sexenios pasados.
La experiencia de quienes han liderado nuestro país es esencial para construir un mejor México, dijo Rojas Díaz sobre su iniciativa.
“Al considerar la posibilidad de que nuestros expresidentes se desempeñen como senadores honoríficos, valoramos décadas de entendimiento sobre las oportunidades y retos que enfrenta nuestra nación”, agregó.
El morenista reiteró que estos senadores honoríficos “no contarían con dieta, fuero ni voto. Además, esta propuesta va más allá de cualquier tema partidista”.
“Esta iniciativa busca enriquecer nuestro sistema legislativo con perspectivas y visiones singulares. Juntos, avancemos hacia un México más informado, resiliente y unido. Les invito a dialogar de manera informada, inteligente y respetuosa”, señaló.