Monreal informó que entre el jueves y viernes habrá un encuentro con Ebrard con el fin de revisar los nombramientos que prevé remitir el Ejecutivo al Senado, hablar con las comisiones de Relaciones Exteriores y con los coordinadores de los grupos parlamentarios del Senado, “para ver qué trámite y qué tiempo le otorgamos, el ritmo que le vamos a otorgar a los nombramientos”.
Anticipó que sí se dará discusión amplia en las comisiones, mismas que para dictaminar cada una de las propuestas deberán verificar el cumplimiento de los requisitos de ley, integrar los expedientes y –eventualmente- citar a comparecer a las personas propuestas.
La polémica, empero, está centrada en el caso del historiador Pedro Salmerón, propuesto originalmente para ser embajador en Panamá, y señalado públicamente por presuntos casos de acoso sexual. Ese gobierno expuso su postura en carta al presidente Andrés Manuel López Obrador, por lo que éste se desistió de proponerlo y lo nombró asesor.
En su conferencia matutina del martes el mandatario anunció que su nueva propuesta para la embajada es la actriz Jesusa Rodríguez, pero descalificó la postura del gobierno panameño que en los hechos no aceptó a Salmerón.
“Como si fuera la Santa Inquisición la ministra o canciller de Panamá se inconformó”, dijo López Obrador en referencia a la canciller panameña Erika Mouynes.
Esta descalificación fue respondida en Twitter por el expresidente de Panamá, Ernesto Pérez Valladares: “La actitud del señor López Obrador en cuanto a la designación de su representante en nuestro país es infantil. Somos un país pequeño pero digno y valiente. Más nos necesita México a nosotros que nosotros a México”.
