En la sesión del Senado este lunes, al fijar su posición en la glosa con motivo del tercer informe de gobierno del presidente López Obrador, la legisladora festejó “evidentes aciertos” en materia económica.
No obstante, dijo que “en tiempos de crisis se espera un gobierno de izquierda que gaste sus recursos para ayudar a la población de manera estratégica, ordenada”.
En este sentido, la legisladora expuso que le preocupa que se haya destinado más dinero a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que a las instituciones de salud del Estado.
“Es decepcionante notar que a Pemex y la CFE fueron alrededor de 70 mil millones y 30 mil millones de pesos, respectivamente. Mientras que el ISSSTE y el IMSS tuvieron erogaciones de 15 mil millones y 17 mil millones. Una cifra que revela con claridad que este gobierno ha elegido salvar a Pemex a toda costa, incluso a costa de la salud de las y los mexicanos y de las micro, pequeñas y medianas empresas golpeadas por la crisis económica causada por la pandemia”, dijo.
La senadora consideró que la empresa productiva del Estado “representa un riesgo para las finanzas públicas", mientras que "esos miles de millones de pesos gastados en tratar de salvar lo insalvable” pudieron utilizarse para la adquisición de equipo médico, medicamentos, transferencias directas, apoyos o estímulos fiscales.
"A estas se les han dado apoyos mínimos e insuficientes y causado la desocupación o subocupación del 26 % de la población económicamente activa (PEA) “lo cual es comparable con el porcentaje observado durante la crisis financiera del 2009”, alertó la petista.
Para 2022, la Secretaría de Hacienda destinará a la petrolera un presupuesto de 636,281 millones de pesos, el más alto de la historia, de acuerdo con los registros de la dependencia. Como parte del aumento de la apuesta por la petrolera, la compañía también elevará su gasto en inversión a un nivel nunca visto, de 429,675 millones de pesos.