Tampoco se convocó a periodo extraordinario en el Senado, para ratificar al secretario de la Función Pública, Roberto Salcedo, y recibir y votar las minutas de los diputados sobre outsourcing y revocación de mandato.
Todo quedó pendiente, pues por el extraordinario votaron solo 20 legisladores: 12 en favor y tres abstenciones, es decir, no hubo mayoría calificada.
Y por solo un sufragio de diferencia, 12 legisladores pidieron devolver el asunto a comisiones y 11 solicitaron desechar el asunto y darlo por concluido, proceso en el que debió usarse la repetición de votación para clarificar la situación.
Libran desafuero… otra vez
Tras más de tres horas de debate, los legisladores pospusieron así el asunto pendiente desde el 5 de julio, cuando la Sección Instructora de la Cámara aprobó la procedencia de la acción penal en contra del diputado Benjamín Saúl Huerta, acusado de violación de menores, y del petista Mauricio Toledo, acusado de enriquecimiento ilícito.
Lo que hizo posible que la Comisión Permanente volviera a trabar la convocatoria a periodo extraordinario de la Cámara para esos desafueros fue que Morena y sus aliados lograron partir en dos a la oposición.
La oposición se dividió porque la mayoría morenista introdujo cuatro temas adicionales, todos sin dictamen.
El diputado Elías Lixa, del PAN, acusó que el asunto más preocupante era el de las reformas sobre revocación de mandato, pues estas, a su juicio, darían "plena libertad presupuestal y propagandística al Poder Ejecutivo".