Los puntos clave sobre la reforma para eliminar el fuero

A unos días de que termine el último periodo ordinario de sesiones de esta Legislatura y a semanas de las elecciones de este año, la Cámara de Diputados aprobó retirar el fuero constitucional a los altos funcionarios y legisladores federales, incluido el presidente, con el fin de que ya no tengan inmunidad procesal y puedan ser llevados a la cárcel si cometen algún delito.

Te damos los puntos clave sobre esta reforma.

¿Qué modificaron los diputados?

Los legisladores cambiaron ocho artículos de la Constitución para retirar el fuero a presidente, diputados, senadores, ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral, consejeros de la Judicatura Federal, secretarios de Estado, fiscal general de la República —puesto aún vacante— y consejeros del Instituto Nacional Electoral.

¿Qué es el fuero constitucional?

Es un privilegio que, hasta ahora, permite que los altos funcionarios y legisladores federales no puedan ser detenidos, procesados y juzgados sin previa autorización del órgano legislativo designado por la ley. También se le conoce como inmunidad procesal.

¿Qué cambió en el caso del presidente?

Los diputados quitaron el segundo párrafo al artículo 108 constitucional, que a la fecha establece que el presidente solamente podrá ser acusado por traición a la patria y “delitos graves del orden común”; además, modificaron los artículos 110 y 111 para señalar que el mandatario federal podrá ser sujeto a juicio político y ser imputado penalmente durante el tiempo que esté en funciones.

¿Qué pasa con los funcionarios locales?

La reforma establece que, a partir de que entrara en vigor, los estados tendrían 180 días —seis meses— para reformar sus normas y homologarlas con la Constitución federal. Esto implicaría que los funcionarios locales, como diputados, presidentes municipales, regidores y concejales, también podrían ser procesados penalmente. Sin embargo, hay entidades que ya se han adelantado en este terreno eliminando el fuero de sus leyes .

¿Un funcionario tendría que dejar el cargo si es acusado?

No, hasta que un juez le dictara sentencia condenatoria.

¿A partir de cuándo se eliminaría el fuero?

Con la aprobación en la Cámara de Diputados, el tema pasó al Senado. Si este aprueba la propuesta sin cambios, la turnará a los congresos locales. Y cuando más de la mitad de estos le dieran el visto bueno, la reforma sería enviada al Ejecutivo para que la firmara y publicara en el Diario Oficial de la Federación. Al otro día de que fuera publicada, entraría en vigor.

¿Podría ser juzgado Peña Nieto?

Enrique Peña Nieto podría ser procesado todavía siendo presidente si la reforma cubre todo el camino que debe recorrer antes de termine la actual administración. Pero aun si esto no ocurre, el hoy mandatario perderá la inmunidad procesal cuando concluya su mandato.

¿Quién hizo esta propuesta de retirar el fuero?

El dictamen que se aprobó y que ya se convirtió en minuta se basa en 32 iniciativas, que fueron presentadas por todas las bancadas de la Cámara de Diputados, así como por tres congresos estatales y ciudadanos.

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¿Todos celebraron la reforma?

No. A pesar de que la eliminación del fuero es una demanda que tiene años, después de que fue aprobada en San Lázaro este jueves algunos académicos criticaron la decisión, pues sostuvieron que es necesario que primero se elija debidamente a quienes ocuparán cargos clave como la Fiscalía General de la República y la fiscalía anticorrupción.

“Quitar el fuero solo tiene sentido como parte de un paquete de reformas, incluyendo autonomía del próximo Fiscal General y los procuradores estatales. Si no, eliminarlo puede llevar a persecución política de la oposición, gobierne quien gobierne. #QuitarFuero ”, escribió en su cuenta de Twitter la politóloga y activista Denise Dresser.

En tanto, el abogado Miguel Carbonell sostuvo que este cambio “suena bien”, pero —dijo— puede generar situaciones “poco edificantes”, mientras que el investigador José Merino consideró que es una medida populista que puede resultar costosa para la democracia mexicana.