Con recursos de la ciudad, se entregan bonos para la sustitución de las unidades a los transportistas que deciden cambiar las rutas por corredores y convertirse en empresas, sin embargo, el incremento de las tasas de interés ha dificultado este proceso, indicó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
“Aun cuando desde el Gobierno de la ciudad damos cerca de 450,000 pesos para sustitución, de todas maneras la tasa estaba sobre 18% más o menos.
“Es un esquema en donde con los fondos de NAFIN permite un fondo de garantía que permite reducir las tasas de interés, además de la capacitación para los dueños de las concesiones para convertirse en empresa”, señaló.
Con NAFIN, los transportistas pagarán la tasa de interés interbancaria de equilibrio (TIIE) más un 1.6%, esto es alrededor del 12.6% en total.
“Es una tasa sumamente baja de acuerdo con las condiciones que vive ahora el mercado”, comentó Luis Antonio Ramírez Pineda, director general de NAFIN-BANCOMEXT.
Al inicio del presente gobierno se tenían contabilizados 5,800 microbuses circulando en la ciudad, así como 4,210 vagonetas y 6,090 autobuses.
Hasta el momento, la Semovi ha entregado 2,485 bonos de chatarrización y quedan pendientes alrededor de 3,300 microbuses.
“Tenemos todo para poder sustituir todos los microbuses de la Ciudad de México entre 2023 y 2024 y estamos haciendo un trabajo muy importante con los transportistas para que se acerquen y puedan entrar a este programa tan importante que permita tener estos autobuses modernos”, afirmó la jefa de Gobierno.