Cinco segundos después de activar el botón de pánico, se manda una señal al C5 para que en un tiempo promedio de cinco minutos acuda una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) a la ubicación del usuario, detenga el vehículo y verifique que está bien.
A un año del lanzamiento de la primera versión, la aplicación del gobierno capitalino se ha descargado aproximadamente 788,000 veces y en ella se han registrado 22,005 taxistas.
Con esta segunda versión, ya disponible, ahora los usuarios podrán pagar al tener instalada la app y la del banco de su elección.
Con el celular, deberán escanear el código QR visible dentro del taxi desde la aplicación de su banco, ingresar el monto que marque el taxímetro en Mi Taxi y confirmar el pago. Esto se da gracias al sistema de Cobro Digital (CoDi) del Banco de México.
A través del pago electrónico, se busca evitar el contacto con billetes y monedas ante la pandemia de COVID-19, además de que, a diferencia de las plataformas privadas, no se cobran comisiones.
"La diferencia aquí es el porcentaje que le cobran tanto al usuario que da el servicio como al que paga, (en plataformas) hay un porcentaje de lo que se paga del viaje que se va directo a una cuenta en otros países", dijo la jefa de gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum.
"En este caso, no se va a la cuenta de nadie más que a la del propio taxista y sale de la cuenta del usuario (…) No se paga ninguna comisión ni a los bancos ni a la operadora del servicio, es un servicio que brinda la Ciudad de México", afirmó.