"(Queremos) hacerle un homenaje a los doctores, enfermeras, que están al frente en esta pandemia (...) crear conciencia con la gente para que entiendan que esto no es un juego y que estamos pasando una situación muy difícil", dice Felipe Garrido, encargado de una tienda del Centro Histórico de la Ciudad de México donde se venden estas prendas.
Figuras de Jesús, casi del tamaño de un recién nacido, exhiben los trajes de "Niño Covid". Van desde simples ropas de bebé con tapabocas hasta trajes azules completos como los de médicos, con máscara de protección, pasando por la clásica bata blanca y un estetoscopio.
Además, todos llevan lo que simula ser gel antibacterial en una mano.
Aunque la afluencia de clientes es menor este año, decenas de personas provenientes de todo el país sortean el miedo a los contagios para comprar el ropaje en comercios del Centro Histórico, a precios de hasta 220 pesos.
"Vengo a comprar al 'Niño Covid' porque mi papá es médico, está sacando adelante a muchos enfermos de COVID-19 y lo estoy protegiendo", cuenta Aline Villegas, fisioterapeuta de 26 años, quien todos los años sigue esta tradición.