Al ser cuestionado sobre si la detención es un regalo para Joe Biden, quien visitará México en los próximo días, Ebrard señaló que “no tiene que ver, la verdad, porque este operativo se mantuvo en extrema reserva por parte de las autoridades encargadas de hacerlo y no hubo intermediación o consulta política en el gabinete”.
La captura de Ovidio
El narcotraficante mexicano Ovidio Guzmán, hijo del capo encarcelado Joaquín "El Chapo" Guzmán y quien es requerido por la justicia estadounidense, fue arrestado en un operativo militar este jueves, dijeron funcionarios.
"La madrugada del 5 de enero, personal del ejército mexicano y Guardia Nacional (...) detuvieron a Ovidio, presunto líder de la facción Los Menores, afín al Cártel del Pacífico", dijo el secretario de la Defensa, Luis Sandoval, haciendo referencia al otro nombre con el que se le conoce al Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo.
"Esta detención representa un golpe contundente a la cúpula de poder del Cártel del Pacífico", agregó.
La captura, explicó Sandoval, fue producto de seis meses de trabajo de reconocimiento y vigilancia. Sin embargo, expertos aseguraron que el operativo estaría relacionado con la visita la próxima semana del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Una vez apresado su líder, pistoleros del grupo criminal realizaron 19 bloqueos y agresiones en la zona, incluyendo el aeropuerto internacional de Culiacán, capital de Sinaloa, y una base aérea militar.
Tras su detención, Guzmán, de 32 años, fue trasladado a Ciudad de México en una aeronave militar.
Aún por la tarde, las fuerzas de seguridad pugnaban por restablecer el orden en diversas zonas de Sinaloa, ubicado en el noroeste del país.
Ovidio, quien se convirtió en una figura clave en el cártel tras el arresto de su padre en 2016, fue detenido en octubre de 2019 por las fuerzas de seguridad, pero fue liberado rápidamente para evitar "un derramamiento de sangre" por parte de sus secuaces, en un bochornoso revés para las autoridades mexicanas.
Desde 2018, Guzmán es requerido por las autoridades estadounidenses por inundar ese país con fentanilo, una potente droga química que ha desencadenado una epidemia de muertes en Estados Unidos. Washington ofrece una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que permita su arresto.
La detención de Guzmán podría anunciar un cambio en el enfoque del Gobierno luego de críticas de muchos expertos en seguridad de que el presidente Andrés Manuel López Obrador no ha sido más frontal con los cárteles, una acusación que él niega.
El mandatario argumenta que las tácticas de confrontación de sus predecesores no tuvieron éxito y solo causaron más muertes. Por el contrario, propuso una estrategia de "abrazos, no balazos" al asumir el poder en diciembre de 2018.
-Con información de Lizbeth Diaz y Dave Graham, de la agencia Reuters.