Desde hace algunas semanas, el presidente López Obrador ha salido en defensa de otra de sus obras insignia: el Tren Maya, luego de la difusión de la campaña Sálvame del Tren, a través de la que ambientalistas, cantantes, actrices y actores pidieron parar la construcción del tramo cinco de esta obra, porque presuntamente provocará daños a la selva y cenotes en la región.
El presidente criticó que, a pesar de que su obra no dañará al medio ambiente, existen quienes protestan por la construcción del Tren Maya y no contra empresas que tenían bancos de explotación de recursos naturales.
“Y es casualidad, pero resulta que comenzamos a decidir sobre una empresa que se lleva materiales de esa zona a Estados Unidos, una empresa constructora muy famosa, yo creo que es la empresa más fuerte en Estados Unidos que tenía un banco, tiene nada que ya no se le permite extraer material, les dieron permiso para eso y están causando un gran daño y es contra el Tren Maya, no contra la empresa, y así muchos casos”, señaló.
No es la primera vez que el presidente acusa a Estados Unidos de financiar movimientos en su contra. Durante meses ha pedido al gobierno de Joe Biden suspender el financiamiento que mantiene a Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), una organización que califica de opositora a su administración.