#Crónica: Meade arranca campaña... sin el 'punch' de los góbers priistas
La marea de gente se esparció rápidamente. Sólo se necesitaron cuatro horas para ocupar y desalojar el Centro de Convenciones de Mérida, donde el abanderado de la coalición encabezada por PRI, José Antonio Meade dio el banderazo inicial de su carrera a la presidencia.
Poco antes de las 10:00 horas, la gente comenzó a llegar al recinto proveniente de todas partes de Yucatán y una hora después, ya era difícil caminar entre los pasillos del Centro de Conveciones Siglo XXI.
La gente se iba acomodando al ritmo de salsa, reguetón y cumbia que tocaba un grupo para calentar el ambiente. Empezaron a sonar los jingles y las canciones con la frase “Pepe presidente” y “Yo con Pepe”. Pero si de porras se trataba, las que resonaban más eran las que iban dirigidas al candidato a gobernador del PRI, Mauricio Sahuí.
Acompañado de su esposa, Juana Cuevas, el exfuncionario federal subió al escenario ya con el ambiente caliente. Saludó, sonrió y bajó a tomar su lugar en primera fila junto a Enrique Ochoa, líder el partido, Aurelio Nuño, Vanessa Rubio, Eruviel Ávila y Alejandra Lagunes .
En el auditorio Chichén Itza estuvieron miembros del gabinete del gobierno federal. Desfilaron José Antonio González Anaya, de Hacienda; Eviel Pérez Magaña, de Desarrollo Social; Gerardo Ruiz Esparza, de Comunicaciones y Transporte; Ildefonso Guajardo, de Economía, y Rafael Pacchiano, de Medio Ambiente.
¿Quién necesita a los gobernadores?
Entre todo el arropamiento, las ausencias también resaltaron: Ningún gobernador, excepto el de Yucatán, Rolando Zapata, que era anfitrión, acompañó a Meade en su arranque de campaña.
Pero para el expresidente de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, ahora candidato al Senado por el PRI, esta no es una señal de debilidad en el apoyo hacia el candidato del partido.
“¿Para qué queremos a los gobernadores? Los gobernadores valen un voto”, respondió el diputado yucateco con licencia cuando se le cuestionó sobre la ausencia de los mandatarios estatales emanados del partido y de las fuerzas aliadas. Para él, el arranque fue un gran éxito, pues Meade pudo demostrar con propuestas que es el mejor candidato.
En otros actos ha tenido una mayor presencia el punch de gobernadores priistas, como cuando se registró como candidato y donde asistieron Manuel Velasco, de Chiapas; Alfredo del Mazo, del Estado de México y Claudia Pavlovich, de Sonora.
Entre las porras y los llamados a hacer un “México chingón”, Meade habló del tema ineludible: corrupción, misma que se comprometió a sacar de la política.
“Frente a la nación me comprometo: encabezaré un gobierno de gente decente, como lo somos la enorme mayoría de los mexicanos, un gobierno en el que el único privilegio sea ser mexicano. No habrá fuero para nadie, seré el primer presidente sin fuero”, exclamó Meade en su mensaje que invadió todo la atmósfera.
No hubo exgobernadores presentes para escucharlo.
Abucheos y aplausos
El candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador no fue mencionado pero sí hubo referencias a él, rostros de desaprobación y abucheos, cuando el candidato del PRI hacía alguna referencia, a su contrincante puntero en las encuestas .
El abanderado priista dice que no se le debe dar perdón a los delincuentes y que la corrupción se ataca con instituciones fuertes y no desdeñándolas y en ese momento la rechifla se escucha.
Ante las propuestas, los que estaban en el recinto yucateco aplaudían las frases del candidato: “Más educación para los jóvenes”, aplausos, “sacar la corrupción de nuestras vidas”, aplausos, “créditos y guarderías para mujeres”, aplausos.
El discurso de Meade duró sólo unos minutos y bastó poco más de una hora para desmantelar el lugar. Poco después de que acabó de hablar el candidato, la gente se esparció por los accesos del centro de convenciones, no sin antes pasar a los módulos de atención ciudadana, para recibir una tarjeta y tachar en una hoja sus necesidades. Son los inicios del nuevo programa social “Avanzar contigo”.
En un momento, el salón que estaba repleto de simpatizantes del PRI, del PVEM y de Nueva Alianza comenzó a vaciarse. La batucada del grupo de jóvenes Huhi se marchó con la última canción al ritmo de samba. Sólo quedó uno que otro cártel en el suelo con la leyenda “Yucatán con Meade”. Pasaban las 14:00 horas y entre las sillas vacías con personificador para los invitados especial al arranque de campaña, la ausencia de los gobernadores se volvió a sentir.
