La mandataria aseguró que el actual Poder Judicial ha sido responsable de favorecer a miembros de la delincuencia organizada y liberado miles de millones de pesos de la delincuencia de ''cuello blanco''.
También destacó que la mitad de los integrantes del Poder Judicial actual llegaron por nepotismo a sus puestos.
''El poder en México está en el pueblo. El día de hoy fue un proceso transparente. Candidatos fueron seleccionados por comisiones de los Poderes'', expuso desde Palacio Nacional.
Sheinbaum dijo que con el nuevo Poder Judicial se hará realidad el anhelo juarista, donde nadie esté por encima de la ley.
''México es el país más democrático del mundo. Tengamos confianza. Vivimos un momento extraordinario'', concluyó.
México celebró este domingo las primeras elecciones de su historia para renovar cargos del Poder Judicial, como parte de una reforma que el oficialismo argumenta es necesaria para reducir la impunidad y democratizar la justicia, pero que sus críticos aseguran podría debilitar los contrapesos de poder.
El año pasado, el gobernante Morena aprobó en el Congreso una polémica reforma que golpeó los mercados financieros y llevó a gobiernos extranjeros, como el de Estados Unidos, a expresar su preocupación por la posibilidad de que se debilite la independencia judicial y se ponga en riesgo la democracia.
En febrero de 2024, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso la reforma, cuya columna vertebral era la elección de miles de jueces y magistrados por voto popular, además de disminuir el número de ministros del máximo tribunal, recortar sus mandatos y abolir requisitos para acceder al cargo, como edad mínima y experiencia laboral.
La polémica enmienda desató una huelga de trabajadores judiciales, tensó las relaciones con Estados Unidos -el mayor socio comercial de México- y generó desconfianza en los mercados por temores de que afectaría el clima de negocios en el país.
El oficialismo sostiene que los jueces son controlados por quienes los nominan, dejando niveles de impunidad superiores al 90%. Los críticos, por su parte, aseguran que la elección expondrá aún más a los jueces a la influencia de fuerzas políticas, intereses particulares y al crimen organizado.