Las personas que migran por los efectos del cambio climático deben ser reconocidas como desplazadas climáticas y acceder al refugio y la protección internacional, recomienda el Instituto para las Mujeres en la Migración (IMUMI).
Además, resulta urgente construir un plan de atención que considere que la emergencia climática afecta de manera desigual y genera mayores estragos en los grupos históricamente discriminados, como las mujeres y las infancias.
“La movilidad por razones climáticas no es un fenómeno neutral en cuanto a la condición de género”, explica Denise Carachure, enlace de dirección de IMUMI.
Al presentar el informe Desplazamiento por razones climáticas, una aproximación desde los derechos de las mujeres, la especialista expuso que las desigualdades económicas, los roles de género, el acceso desigual a los recursos y la dependencia económica causan mayor vulnerabilidad para las mujeres, en comparación con los hombres, durante los desastres naturales.
Por esta razón la migración se convierte en una alternativa mayor para que las mujeres hagan frente a los impactos del cambio climático.
Aunque no hay datos certeros sobre el desplazamiento climático, se estima que de 2009 a la fecha más de 24 millones de personas migran cada año en el mundo por los efectos de los desastres naturales.
Las cifras han sido calculadas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, que además proyecta un desplazamiento climático de hasta 143 millones de personas en 2050, sobre todo en Centroamérica, América del Sur, África Subsahariana y Asia Meridional.
“Es decir, el equivalente a más del total actual de la población mexicana estará desplazada en dos décadas”, apunta el informe.
Por esta situación, el documento de IMUMI emite una serie de recomendaciones al gobierno de México para que diseñe un marco legal de protección para las personas que se desplazan por razones climáticas que les otorgue protección más allá de las visas humanitarias por desastres naturales.
De acuerdo con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, 18,439 mujeres solicitaron asilo en el primer semestre de 2024, es decir, 45% del total de las solicitudes son de mujeres.
Sin embargo, se desconoce si algunas de las razones para buscar protección derivan de los efectos del cambio climático.
“Este documento brinda una serie de recomendaciones a la sociedad civil y gobierno, pero, en especial, al gobierno de México, para que diseñe un marco legal de protección para las personas que se desplazan por razones climáticas y que, al no estar reconocidas jurídicamente, no han tenido opciones ni de regularización migratoria ni de acceso a protección internacional”, subraya Denise Carachure.
El informe recomienda también la recopilación de datos que muestren el impacto del cambio climático en la vida de las personas en movilidad; el reconocimiento del cambio climático como una causa de desplazamiento y acciones concretas de protección para mujeres y niñas en contextos de movilidad, cuya vida ha sido afectada por el cambio climático.
Gretchen Kuhner, directora general de IMUMI, indicó que estas recomendaciones podrían ser consideradas por el próximo gobierno federal, que encabezará Claudia Sheinbaum.
“En México vamos a tener un nuevo sexenio. Tenemos a una presidenta científica, que entiende el cambio climático. Hay una persona que va a estar encargada de la Secretaría de Medioambiente que también es científica, que entiende el cambio climático. Además ha estado en Relaciones Exteriores y entiende muy bien la movilidad humana”, apuntó.
