“Ya tengo el documento donde la Comisión de Derechos Humanos reconoce que fue torturada. Le aplicaron el protocolo de Estambul. Fue víctima de tortura. Once años en la cárcel. No sé si sea culpable o inocente, yo no soy juez. Lo único que he dicho es que en estos once años no la he abandonado. He ido puntualmente o trato de ir cada quince días al penal”, contó.
La aspirante opositora dijo que cuando su hermana fue acusada y encarcelada, sintió vergüenza y quiso irse lejos, donde nadie la conociera. Sin embargo, con el paso del tiempo conoció los detalles de lo ocurrido.
“Me quedé con sus dos hijas. Una es ingeniera aeronáutica y la otra ingeniera industrial, y las dos trabajan en la empresa conmigo. Hice lo posible para que la historia no se repitiera. Si ella cometió un error, lo ha pagado con creces, si no lo cometió y el Estado la encarceló injustamente... Si hizo indebido habrá pagado, si no lo hizo me solidarizo con ella”, dijo Gálvez a Adela Micha.
La senadora señaló que ella y su hermana tuvieron que pasar por un entorno complejo, lleno de violencia, mientras crecían.
“La acusan de secuestro, la acusan de haber estado cuidando a una persona secuestrada. Hay testigos que dicen que ella no estaba... Hubo tortura para sacarle la confesión. Hay evidencias, pruebas, pero en once años no ha podido la Fiscalía mostrar lo que dice”, dijo.
“Ha sido muy doloroso para la familia. Salí a dar la cara, no salí a decir que no la conozco. Ni modo. Yo sí quería irme lejos, que no me conociera nadie. El morbo, la pregunta, es doloroso. Pero es más doloroso que ella esté ahí. Es muy cañón. Hoy podría entender las injusticias, pero también qué hacer para evitar que familias desintegradas, sus hijos acaben...”, agregó.
En febrero pasado, en Nueva York, un jurado declaró culpable por narcotráfico a García Luna.
García Luna trabajó en el cuerpo de inteligencia durante una década, encabezó la Agencia Federal de Investigación (AFI), cuyo objetivo principal era luchar contra organizaciones criminales, durante el gobierno de Vicente Fox (2000-2006), y fue secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012).
Desde 2012 vivía en Florida, desde donde, según mostró la Fiscalía durante el juicio, viajaba habitualmente a México.
El exfuncionario, detenido en diciembre de 2019 en Dallas (Texas, Estados Unidos), ha estado en prisión hasta el arranque del juicio el pasado 17 de enero, cuando comenzó la selección del jurado.
En su Administración, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha buscado que políticos mexicanos detenidos en Estados Unidos por dinero ilícito devuelvan al Gobierno recursos públicos, como persigue con una demanda civil en Miami para recuperar más de 700 millones de dólares de la familia de García Luna.
-Con información de EFE.