Gilles Lipovetsky, filósofo y sociólogo francés, afirmó que en el siglo XXI el planeta enfrenta un desarreglo en tres grandes aspectos: en democracia, orden mundial y cambio climático.
Dijo que desde el año 2005 hay un desarreglo democrático en el que varios países en los que su democracia está en regresión.
“Las dictaduras pasaron de 20 a 30 en 10 años, un cuarto de la humanidad vive bajo una dictadura y las democracias liberales que parecían ir hacia adelante son solamente 34. Entonces, donde nos prometían el fin de las dictaduras, de hecho, nada está seguro, las dictaduras desgraciadamente avanzan, progresan”, alertó.
La humanidad en constantes crisis
Los expertos coincidieron que si bien el mundo se ha mantenido en constantes crisis, hoy atraviesa por una multicrisis que se manifiesta en problemas económicos, de salud, de cambio climático, falta de empleo, para la cual la democracia es un factor clave, porque ésta debe generar las soluciones a esos problemas.
Martha Delgado, subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, planteó que el mundo siempre ha estado inmerso en crisis y de varias de ellas, los gobiernos son corresponsables. Consideró que las crisis del siglo del XXI son de las más severas, por ejemplo, lo que sucedió con la pandemia de coronavirus en la que la vida estaba en constante riesgo.
Otra más es la crisis climática, en la que desde hace 40 años se han alertado sobre los riesgos y efectos de la humanidad, sin embargo, dijo que los países actúan con “rentelización” de las decisiones, porque los ciudadanos no se van a morir en dos o tres décadas.
“Está crisis climática que viene va a ser enseñanza como especie, brutal. A veces tiendo a pensar que el planeta necesita de esa purga y necesita menos de nosotros, quizá sea necesaria y recomendable”, alertó.
Yolanda Díaz Pérez explicó que el mundo está enfrentando una policrisis manifestada en los aspectos de salud pública, económica, social, ambiental, ecológica y alimentaria, para las cuales falta capacidad de respuesta.
“Nos encontramos ante esto que yo llamo una crisis matrioshka, es decir, es la primera vez en la que nos encontramos en una pluralidad de crisis que están actuando a la vez y de manera transversal. Esto es lo que lo hace singular”, planteó.
Alejandro Gavira, ministro de Educación de Colombia, consideró que el mundo siempre ha vivido en crisis, pero la que hoy se enfrenta es distinta por la falta de interés para colaborar con quienes se desconoce, por la desconfianza, y por la situación económica que se vive.
“Ante todas estas crisis sería fácil resignarse”, reconoció el funcionario del gobierno colombiano, sin embargo, dijo que los sacrificios valen la pena, cuando se buscan las transformaciones.