Fue el 18 de marzo cuando se confirmó la primera víctima de la pandemia en México, y aunque hasta el momento se han confirmado esos casi 117,000 muertes hay un excedente de al menos 228,954 decesos en la proyecciones para este año, de las que una gran parte estaría relacionadas con el COVID-19.
El reporte presentado la noche de este viernes también indica que ya se han confirmado 1 millón 301,546 contagios a casi 10 meses de que se declaró formalmente la entrada de la pandemia a México, que vive un repunte de los casos y una nuestra de ello es que entre ayer y hoy se confirmaron 12,248 contagios.
La intensidad actual de la pandemia obligó a los gobiernos federales, de la Ciudad de México y del Estado de México a decretar el semáforo rojo para ambas entidades, es decir la suspensión de las actividades no consideradas como esenciales en un intento por evitar frenar la cadena de contagios y evitar que el sistema de salud colapse a causa de las fiestas decembrinas.
La suspensión de las actividades no esenciales durará desde este sábado 19 de enero hasta el próximo 10 de enero, por lo que en ambas entidades solo se permitirán los servicios de venta de alimentos sin preparar o preparados, pero sólo para llevar o de entrega a domicilio, sin consumo en sitio; los de energía, transporte, manufactura, salud, servicios funerarios, de construcción, financieros y de telecomunicaciones; la fabricación y venta de medicamentos, tanto al público como la cadena de producción; los talleres de reparaciones y refacciones, así como los servicios de gobierno: tributario, de seguridad, obra pública, agua y servicios necesarios para su operación.