Autoridades del gobierno federal y de los estados de Quintana Roo y Jalisco lograron la repatriación de 86 mexicanos que estaban varados en dos cruceros, cuyo desembarco se había visto detenido por la pandemia de COVID-19 y el cierre de puertos en diversos países.
El 14 de mayo desembarcaron 68 personas en Cozumel, Quintana Roo, de la naviera Disney Cruise. Este viernes 15 de mayo, lo hicieron otras 18 personas en Puerto Vallarta, Jalisco, de la naviera Carnival Corporation.
En el caso de las 68 personas que pudieron tocar tierra en Cozumel, a mediados de semana se informó que eran trabajadores mexicanos que estaban varados. El presidente municipal de Cozumel, Pedro Joaquín Delbouis, señaló en un comunicado que no había riesgo para la población pues todos los mexicanos repatriados en el crucero están libres de COVID-19.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que se ha mantenido contacto con los mexicanos desde marzo para brindarles asistencia consular e información sobre sus opciones para desembarcar.
La cancillería informó que aún continúan las gestiones para apoyar a otras personas mexicanas en situación similar, ya sea mediante operaciones en puertos mexicanos o mediante terceros países.
“A través de nuestras representaciones diplomáticas en el exterior se mantiene comunicación con las empresas de cruceros, incluyendo con las oficinas matrices”, explicó la SRE en un comunicado de prensa.
En estos esfuerzos de repatriación participaron la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, la Guardia Nacional, el Instituto Nacional de Migración, el Servicio de Administración Tributaria (Administración General de Aduanas), los gobiernos de Quintana Roo y Jalisco, así como los gobiernos municipales de Puerto Vallarta, Cozumel, Solidaridad y Benito Juárez.
Al inicio de la pandemia, los habitantes de Cozumel protestaron por la llegada a este puerto del crucero MSC Meraviglia, con 4,580 pasajeros, después de que Jamaica e Isla Gran Caimán rechazaran su petición de atracar por un caso sospechoso de coronavirus, que luego fue desmentido por la compañía propietaria del barco.
Finalmente, luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió el desembarque del crucero llamando a no actuar con discriminación, los pasajeros del MSC Meraviglia atracaron en Cozumel el 27 de marzo, y un día después, tras estudios médicos, comenzaron a desembarcar.
