Elementos de la Policía Federal protestan en contra de ser adscritos "sin previo aviso" a la Guardia Nacional y denunciaron una serie de irregularidades en estos procedimientos que afectarían sus derechos laborales, algo negado por el gobierno federal.
Más de 1,500 uniformados y familiares tomaron este miércoles el Centro de Mando en la Ciudad de México en demanda de que sus prestaciones no sean suspendidas. En el lugar, Patricia Rosalinda Trujillo Mariel, representante de esta corporación en la Guardia Nacional, fue agredida cuando trataba de mantener un diálogo.