René Juárez anunció este lunes su renuncia a la presidencia del CEN del PRI, luego de la derrota que sufrió el partido en las elecciones pasadas, en las que su abanderado presidencial, José Antonio Meade, quedó en el tercer lugar con apenas 7.4 millones de votos, 12 millones menos de los que obtuvo Enrique Peña Nieto en la contienda de 2012.
"Quiero un PRI democrático donde sus candidatos y dirigentes se elijan desde la militancia", dijo en un mensaje a medios en el que destacó su autocrítica al tricolor.
Juárez hizo una serie de cuestionamientos sobre los motivos por los que el PRI ha perdido respaldo ciudadano, y consideró que los priistas solo han "adecuado cosméticamente al partido" y no entendieron el entorno actual.
"A la militancia le toca hablar y democratizar sus procesos internos", aseguró, rodeado de otros integantes de la cúpula priista.
"Llegué a la dirigencia con la frente en alto, con la frente en alto me retiro", concluyó el guerrerense, quien ahora buscará encabezar el grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados.
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Juárez asumió la dirigencia del partido apenas el 2 de mayo, en sustitución de Enrique Ochoa. Por orden de prelación, y según los estatutos del PRI, Claudia Ruiz Massieu, secretaria general del partido, asumirá la presidencia.
En mayo pasado, cuando Juárez asumió, le correspondía a Ruiz Massieu asumir el cargo; sin embargo, ella pidió licencia unas horas para que el guerrerense tomara la riendas en la recta final de la campaña de Meade.
Este lunes, tras el mensaje de Juárez, la nueva dirigente reconoció el trabajo de su correligionario y reconoció que asume las riendas del PRI en un momento complicado.
Ruiz Massieu explicó que en los próximos días convocará a la Comisión Política Permanente para la renovación de la dirigencia del partido para el periodo 2015-2019, y dijo que trabajará para que, desde la unidad y la democracia interna, logren renovarse y reinventarse para seguir siendo un partido que se gane la confianza de la gente.
"Asumo la presidencia como una militante que ama al PRI y ama a México", afirmó.
Los últimos días
En las dos semanas posteriores a la elección, Juárez se encargó de reunirse con los grupos del PRI para mantener el mensaje de que los priistas tenían que estar unidos frente al reto que venía para el futuro y su reconstrucción. Llamó a simpatizantes, jóvenes, mujeres y antiguos líderes del partido a trabajar juntos, pero no fue suficiente.
OPINIÓN: El PRI se traicionó, ¿es posible refundar al partido?
Tres días después de la derrota electoral del 1 de julio, el ahora exdirigente nacional llamó a la autorreflexión en el partido y aseguró que este ejercicio se realizaría de manera responsable y sin autoflagelarse.
"Habremos de iniciar un proceso de reflexión profundo, del tamaño en que los ciudadanos nos han dado esta lección. Pero será una reflexión serena y prudente. No habremos de permitir que nadie nos quiera dividir, ni nos vamos a autoflagelar ", afirmó.
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Pero desde dentro, una fracción del PRI se sentía traicionada y pedía su destitución. El líder de Democracia Interna, Ulises Ruiz, pidió su renuncia y responsabilizó al presidente Enrique Peña Nieto de los peores resultados que ha tenido el PRI en 24 años.
Previo a la elección, el guerrerense había dicho que no "iba a enterrar a nadie" . Sin embargo, en los pasados comicios el priismo alcanzó apenas 16% de la votación, perdió todas las gubernaturas en juego y su representación en el Congreso de la Unión será la más baja en la historia.