Antes de las declaraciones de Moreno, ya se le había planteado al aspirante naranja declinar por Xóchitl.
En la Ciudad de México, dos aspirantes de MC que competían por las alcaldías han declinado: Pablo Moreno, candidato por Iztacalco, a favor de la coalición PAN, PRI y PRD; así como Esther Bolaños, candidata por Álvaro Obregón, en respaldo a Morena, PT y PVEM.
Mientras Norberto Corona, candidato de Fuerza y Corazón por Sonora, declinó no para apoyar a otro aspirante, sino por recibir amenazas en contra de su vida.
¿Qué pasa cuando candidato o candidata decide declinar?
La figura de declinación no existe en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales federal, sin embargo un aspirante sí puede renunciar a su candidatura.
Para ello, la persona que decida dejar su candidatura debe presentar su renuncia ante el Instituto Nacional Electoral (INE) o ante el órgano electoral de su entidad, de tratarse de un cargo local.
Con ello, el partido político o coalición puede elegir a otra persona, siempre y cuando esta renuncia de realice 30 días naturales antes de la elección, de acuerdo con el Artículo 241 de dicha ley. Este año, el plazo venció el 3 de mayo pasado.
La declinación se trata de un acto más simbólico, en el cual el candidato o la candidata anuncia su decisión de ya no buscar el cargo y comúnmente llama a sus simpatizantes a votar por otra de las fuerzas políticas.
Sin embargo, al solo declinar en lo público, los votos que se registren a su favor en la boleta aún cuentan para este aspirante y el partido o coalición que representa.