“Hablé con él hace ocho días y está en muy buen ánimo, lo vi, platicamos un largo rato y me pareció que está en una posición muy clara muy tranquilo de haber tomado una decisión correcta y de estar convencido de apoyar a la doctora Claudia y al movimiento”, expresó en entrevista.
Si lo vamos a ver -dijo- de regreso en actividades de Morena, “seguramente en la campaña”.
Sin embargo, dijo desconocer si Ebrard decidió anotarse como precandidato al Senado por Morena, posición que correspondía, por acuerdo político, al segundo lugar en la contienda interna de Morena para elegir la coordinación de los comités de defensa de la cuarta transformación.
Monreal regresó hoy a su primera sesión en el Senado tras participar en esa contienda y aseguró que por ahora no aspira a volver a la coordinación del grupo parlamentario de Morena y por tanto a presidir la Junta de Coordinación Política (Jucopo) pero no descartó que regrese a esa posición cuando Eduardo Ramírez se vaya como precandidato al gobierno de Chiapas.
Descartó también que parte de la negociación de Morena con él haya sido aceptar el triunfo de Sheinbaum a cambio de que su hija Catalina Monreal sea la candidata de Morena a la alcaldía Cuauhtémoc, pues lo decidirán las encuestas.
Dijo que como senador, sin descuidar esa función, se dedicará a su cargo de coordinación política de la precampaña de Sheinbaum, en labor compartida con López Hernández. A cada uno tocarán 16 entidades del país.
La tarea será “ayudar a buscar perfiles, conciliar como operador político en donde haya conflictos y donde no los haya tratar de mantener la unidad”.
Expuso que realizará “análisis y diagnósticos políticos y tratar de generar condiciones propicias para el triunfo electoral”, además de contactos con enlaces directos de Morena en los estados y “tendremos que platicar con los que son parte del movimiento y con los militantes, tratar de mantener el equilibrio en nuestro movimiento para tratar de evitar fugas, deserciones, rupturas, y trabajar en armonía con la precandidata”.