Ambos dictámenes a las minutas remitidas por el Senado fueron avaladas por la Comisión de Justicia con 19 votos a favor de Morena y aliados pero con 14 votos en contra, emitidos por partidos de oposición, mismos que acusaron que con estas reformas se afecta a la división de poderes y se abre la puerta a posibles violaciones a los derechos humanos.
En la sesión que se realiza hoy en la Cámara de Diputados se dio primera lectura a ambos dictámenes, en espera de aprobarlos en la sesión del pleno, mañana.
De manera infructuosa la oposición propuso que se difiriera la discusión, pero los partidos de la llamada Cuarta Transformación rechazaron las peticiones y tras una breve discusión, tras una sola ronda en ambos casos, avalaron los dos dictámenes.
En el caso del que propone reformar la Ley de Amparo, el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Juan Ramiro Robledo, afirmó que hoy “hay una invasión a la división de poderes por parte del Judicial que se ha abrogado la última palabra en todos los asuntos, por eso hablamos del gobierno de los jueces, este tema da para más, pues como en el caso del Tribunal Electoral se han excedido al emitir criterios por encima de la Constitución”.
La suspensión con efectos concretos y no generales, se preserva dijo el morenista, quien se quejó de que hoy los jueces “decretan suspensiones sin límite de tiempo” y es lo que buscan acotar.
“Los derechos de las personas están intocados, la propuesta es que los jueces no tomen una atribución que es única de la SCJN, que es suspender con efectos generales una ley o una norma general cuando un poder está demandando a otro poder en controversia constitucional, ese el único caso en el que se permite la suspensión con efectos generales, antes de entrar a una discusión”, expuso.
Además el diputado de Morena aseguró que en el diálogo judicial que realizó la Cámara ya se abordó la reforma -misma que fue propuesta apenas el 4 de abril por el coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal-- que propone modificar los artículos 103 y 107 de la Ley de Amparo.
En la discusión la diputada panista Paulina Rubio centró el debate de las modificaciones: se trata de "la venganza del presidente por la República por las suspensiones que se concedieron por el ecocidio del Tren Maya. Lo que no quieren decir los diputados de Morena es que quieren que el Poder Judicial no pueda parar a la autoridad cuando se contraviene el interés social, como el hecho de acabarse la selva con el Tren Maya o que estén contaminando el agua”.
La reforma “es absolutamente regresiva y agresiva a la ciudadanía común, ya que aleja cada vez más de la posibilidad de defensa de abusos de autoridad, corrupción y acceso a la justicia”, de acuerdo a la diputada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Elizabeth Pérez.
“Prácticamente esta es la revancha del Ejecutivo ante todo lo que le ha ganado la ciudadanía y este Poder Legislativo, por mucha mayoría que tenga el oficialismo dentro de este legislativo, porque cuando se violentan los derechos humanos entonces existen este tipo de figuras como es la Ley de Amparo para proteger de esos excesos, eso se llama el control de poderes”, indicó la perredista.
También la diputada de Movimiento Ciudadano María Fernanda Félix advirtió que se pretende limitar al Poder Judicial en su tarea de control de los Poderes Legislativo y Ejecutivo cuando afecten derechos.
"El Ejecutivo se ha aferrado a quitar poder a jueces para no detener reformas inconstitucionales o que violan derechos humanos, dejando desamparados a ciudadanos”, y por eso, alertó, de prosperar los cambios no podrán ampararse de abusos de Morena, de sus secuaces, de López Obrador o del presidente que venga".
