Iniciativas para regular la maternidad subrogada en la CDMX encienden debate

¿Qué es la maternidad subrogada?

La maternidad subrogada es un método de reproducción en el que una mujer lleva en su útero un embrión de otra persona, que por alguna razón no puede conseguir o llevar a término un embarazo.

A esta mujer se le denomina como gestante y no tiene derechos ni obligaciones sobre el embrión una vez que nazca, pues su cuidado y resguardo queda a cargo de la madre, el padre o la pareja.

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¿Cómo funciona la maternidad subrogada?

En México no existe una ley general para la maternidad subrogada, sin embargo algunos estados ya cuentan con legislaciones en la materia: Tabasco y Sinaloa ya regulan este método de concepción, mientras se encuentra prohibido en San Luis Potosí y Querétaro.

¿Es legal la maternidad subrogada en la Ciudad de México?

La maternidad subrogada no tiene legislación en la Ciudad de México, por lo cual no está prohibida, pero tampoco cuenta con ninguna regulación en la capital.

En noviembre 2010, la extinta Asamblea Legislativa aprobó la Ley de Gestación Subrogada para el entonces Distrito Federal, la cual establecía los criterios para que mujeres pudieran gestar los embriones de otra pareja sin fines de lucro.

Aunque fue admitida con 40 votos a favor, 10 abstenciones y un voto en contra, dicha ley nunca fue publicada en la Gaceta Oficial, por lo que no entró en vigor.

¿Qué dicen las iniciativas sobre gestación subrogada en la CDMX?

En el Congreso capitalino hay dos iniciativas pendientes sobre maternidad subrogada, una de ellas presentada por el PRD y otra por Morena.

La propuesta presentada por la morenista Esperanza Villalobos define la maternidad subrogada como “la práctica médica consistente en la transferencia de embriones humanos en una mujer, producto de la unión de un óvulo y un espermatozoide fecundados por una pareja”.

La iniciativa de Villalobos considera sólo a las parejas unidas en matrimonio, tanto aquellas heterosexuales, formadas por un hombre y una mujer, así como las homosexuales, integradas por dos personas del mismo sexo.

En esta propuesta, la pareja proporciona el óvulo y el esperma por lo que son considerados padres biológicos, mientras en el caso de las parejas homosexuales uno de sus integrantes aporta ya sea el óvulo o el esperma y la otra célula progenitora será obtenida de instituciones privadas o públicas dedicadas a su donación.

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En la iniciativa del perredista Jorge Gaviño la maternidad subrogada es “la práctica médica auxiliar para la procreación entre un hombre y una mujer, consistente en la transferencia del embrión humano en la mujer gestante, producto de la unión de un óvulo y un espermatozoide fecundados por una pareja”.

La propuesta del PRD incluye a las parejas casadas así como aquellas que viven en concubinato; también contempla a las mujeres en un estado civil diferente –solteras, por ejemplo– entre quienes podrán acceder a este método, sin embargo no hace mención de parejas homosexuales.

Maternidad subrogada: derechos y obligaciones

Ambas iniciativas coinciden en que las partes aceptan de forma libre y sin fines de lucro llevar participar en la maternidad subrogada. Para la mujer gestante la relación finaliza al término del embarazo, por lo cual no tendrá una relación con el bebé, ya que el vínculo familiar reconocido es con la pareja.

Las propuestas coinciden también en que la mujer gestante acepta estos compromisos:

• Debe procurar el sano desarrollo del embrión en todas sus etapas de desarrollo hasta el parto.
• Seguirá las indicaciones prescritas por el personal de salud, incluyendo estudios y tratamientos necesarios para el buen desarrollo del proceso.
• Evitará consumir sustancias nocivas y realizar actividades de riesgo.
• Debe ser mayor de edad con capacidad plena de goce y ejercicio, apta médica y psicológicamente para tener un embarazo.
• Entregará al término del embarazo al menor a la pareja o matrimonio asistido.

En la propuesta de Morena, la mujer gestante tiene estos derechos y requisitos:

• Se requiere que resida en la Ciudad de México un mínimo de tres años antes del proceso.
• No haber participado antes en un proceso de maternidad subrogada.
• Puede interrumpir el embarazo hasta antes de la semana 12 de gestación.
• Recibir por parte del matrimonio asistido un seguro de gastos médicos mayores que deberá cubrir todo el proceso de maternidad subrogada y hasta dos años después de que se lleve a término el embarazo, cuyos gastos deberán ser cubiertos por la pareja.

Mientras la iniciativa del PRD considera estos derechos y obligaciones para la mujer gestante:

• Debe informar a la persona con quien esté unida en matrimonio o concubinato de su intención de participar en el proceso.
• Puede participar hasta en tres procesos de maternidad subrogada.
• Debe expresar que sus óvulos no fueron usados para la fecundación y no es la madre biológica del menor.
• Tiene derecho a los cuidados médicos que sean necesarios durante todo el proceso, con independencia de si se logra o no el nacimiento.

• Está en el derecho de interrumpir el embarazo en dos circunstancias: por su propia decisión, si corre peligro de afectación grave a su salud; o con autorización de la pareja, si el producto del embarazo presenta alteraciones que pongan en riesgo la sobrevivencia del mismo.

Las dos propuestas posicionan a la Secretaría de Salud capitalina como la responsable de certificar a las instituciones públicas y privadas para realizar los procedimientos de maternidad subrogada, así como de crear un registro de mujeres gestantes así como de parejas, cuyos datos deberán ser resguardados.

¿Por qué son polémicas estas iniciativas?

Con lemas como “no a los vientres de alquiler” y “las mujeres no somos mercancía”, colectivos feministas se manifestaron frente al Congreso capitalino el pasado 16 de febrero en rechazo a las iniciativas que buscan regular la maternidad subrogada.

Los diputados basan sus propuestas en el Artículo 4 de la Constitución Mexicana que trata sobre el derecho de las personas para decidir el número y espaciamiento de sus hijos, a lo que se suma el Artículo 6 de la Constitución capitalina que menciona el derecho de las personas a acceder a métodos de reproducción asistida.

Sin embargo colectivos como Brujas del Mar, Las Constituyentes MX y Marea Verde México consideran este proceso como una explotación de las mujeres.

“Los Estados deben reconocer que prácticas nocivas como los embarazos forzados y la explotación comercial o altruista de las capacidades reproductivas de las mujeres que entran en juego a la maternidad –entre comillas– subrogada son vulneraciones de la integridad física de niñas y mujeres y deben eliminarse como formas de discriminación basadas en el sexo”, sostuvieron las manifestantes citando la Declaración Internacional de las Mujeres.