Las actividades que se reactivarán son el servicio de restaurantes al aire libre; en el Centro Histórico comercios esenciales con modalidad para recoger y atención en ventanilla; en tercer lugar clases deportivas y gimnasios al aire libre.
Desde el 18 de enero comenzará la apertura de restaurantes al aire libre bajo las siguientes condiciones:
- Consumo hasta las 18:00 horas
- Únicamente servicio en terrazas y mesas al exterior: mesas colocadas en zig zag y 1.5 metros de distancia
- Máximo cuatro personas por mesa
- Uso obligatorio de código QR
Los restaurantes podrán ocupar estacionamientos, banquetas, franjas de estacionamiento sobre el arroyo vehicular y carriles sobre el arroyo vehicular para brindar el servicio al aire libre.
En tanto, los comercios del Centro Histórico deberán operar solo en modalidad para recoger con citas, esquemas de venta por teléfono o en línea, y tendrán que aplicar el uso de cubrebocas obligatorio para sus empleados, vender con cortinas cerradas sin permitir el ingreso al local y mantener la sana distancia al exterior del local.
De igual forma, las autoridades permitieron a los centros comerciales operar las 24 horas de los siete días de la semana para así evitar aglomeraciones.
La decisión de permitir la reapertura de los restaurantes se da tras una semana de protestas bajo la campaña #AbrimosOMorimos, por un grupo de restauranteros que con cacerolazos y abriendo pese a las restricciones presionó a las autoridades.
A la demanda se han sumado comerciantes del Centro Histórico a través de la asociación ProCentrhico A.C., quienes piden permitir la reapertura de los negocios que cumplan con las medidas de prevención.
Hospitalizaciones, al alza
La Ciudad de México ha superado el pico de hospitalizaciones proyectadas por las autoridades capitalinas: la ciudad registra 7,112 pacientes de COVID-19 y en el Valle de México son un total de 9,677 personas.
Este nivel de hospitalizaciones está por encima del peor escenario presentado por el Gobierno capitalino, en donde se estimaba que la Zona Metropolitana del Valle de México alcanzaría un máximo de 9,512 camas ocupadas al 11 de enero, para después disminuir.