Las elecciones en Veracruz ponen a prueba el gobierno del panista Yunes Linares

La elección de Veracruz, en la que se disputan las 212 presidencias municipales, es vista por analistas y personajes políticos como un termómetro para calificar los primeros meses del gobierno que encabeza el panista Miguel Ángel Yunes Linares, el primer mandatario emanado de una fuerza política distinta al PRI en 86 años.

Pero también es un escenario en el que PRI tratará de mantenerse a flote como oposición, pese su imagen desgastada, luego de los escándalos de corrupción del exgobernador Javier Duarte, que lo tiene preso en Guatemala y bajo proceso de la Procuraduría General de la República (PGR) por delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

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De acuedo con analistas, el escenario más desfavorable es para el PRI —que perdió la gubernatura en 2016 con 34.78% de los votos— por enfrentarse a un proceso electoral con nuevas reglas y sin que tenga el control del presupuesto público que, de acuerdo con sus opositores, fue utilizado por décadas con fines electorales.

"El que juega a ver qué pasa, como nunca antes lo había hecho en Veracruz, es el PRI, que por primera vez en 86 años juega con nuevas reglas como una mayor fiscalización. Ahora hasta los tamales que repartan serán fiscalizados y no por el organismo local, sino por el INE, no tienen el control del erario público y tienen una imagen bastante desgastada", señaló Fredy Marcos Valor, representante del PRD ante el OPLE.

El líder estatal del sol azteca, Jesús Alberto Velázquez consideró que el escenario de este proceso electoral es muy distinto al de otros años porque la alianza entre el PRI y el PAN se mantiene.

"Para el PRD ese distinto, por primera vez vamos en alianza y lo que esperamos es que continúe el cambio que ya se dio a nivel estatal, que ahora suceda en los municipios y es claro que para lograr eso, ahora ya siendo gobierno, pues importan los resultados que estamos dando y confiamos en obtener resultados positivos en la elección", dijo.

El l columnista Aurelio Contreras Moreno, reconocido en el ámbito estatal, consideró que el PRI enfrenta uno de los peores escenarios que ha tenido en su historia política en Veracruz, resaltó que además de de entrentarse al PAN-PRD que son gonierno, el PRI tiene en su contra el crecimiento de Morena en la entidad.

"El PRI es un partido desarticulado, quizá mantiene ese monopolio que le caracteriza en algunos municipios pequeños, pero en los grandes centros urbanos está desgastado (...) si acaso mantendrá 50 ó 60 municipios de los 212, porque por un lado enfrenta al PAN-PRD y por otro el partido que está creciendo, con base en encuestas, es Morena, ese parece ser su enemigo a vencer", explicó.

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Medición para Yunes

El PRI considera que si bien se trata de una elección para alcaldes, la acciones que ha ejercido el gobierno estatal encabezado por el panista Miguel Ángel Yunes Linares, tendrán eco en la decisión de los electores y advierten que si el mandatario local tiene la tentación de influir en la elección —donde su hijo, Fernando Yunes, compite por el municipio de Veracruz (puerto)— procederán en la instancias correspondientes.

"Será una buena medición, en pocos meses, de lo que ha hecho este gobierno (...) y seguramente en el ánimo del gobernador está el ganar el mayor número de municipios, pero debe mantenerse al margen y si se entromete en la elección deberemos proceder", comentó a el representante del tricolor ante el OPLE, Marco Antonio Aguilar Yunes.

Contreras también advierte en la elección una apuesta del gobernador Yunes para fincar su proyecto político personal y de familia.

"Se juega una especie de refrendo a su gobierno a un año de que él ganara la elección, será como una buena medición sobre la percepción ciudadana del estado de cosas que hay en Veracruz. Lo que se está jugando es su proyecto, tanto así que uno de sus hijos está en la contienda", observa el analista.

Miguel Ángel Yunes ganó la gubernatura en 2016 con 130 mil votos de diferencia a su primo, Héctor Yunes, con lo que se puso fin a 86 años de gobiernos priistas. De acuedo con una encuesta de Consulta Mitofsky , en 10 meses, Yunes logró mejorar la aceptación del gobierno veracruzano entre la ciudadanía en casi 10 puntos (39.9%), en comparación con Javier Duarte (30.4%). No obstante, hay un 53.8 que se dijo en desacuerdo con la administración.

La diputada local de Morena, Carola Viveros, también resaltó que la intención de parte de Yunes Linares en estas elecciones es formar una estructura que sirva de trampolín para él y su familia en el 2018.

"Uno de sus hijos es candidato y se ha dicho mucho que busca que uno de sus hijos lo suceda en le gobierno, entonces (el gobernador) busca armar una estructura que sirva de trampolín", manifestó.

PRI, por conservar alcaldías

Aunque en el PRI están concientes de las dudas del elector para darle su voto, confían en que las propuestas de sus candidatos en los 212 ayuntamientos los hagan por lo menos mantenerse como gobierno local en los 95 ayuntamientos que actualmente presiden.

"Es un escenario nuevo para el PRI, tenemos que ir bajo un esquema al que no estábamos acostumbrados, hoy somos oposición y el elector tiene dudas, a veces muy serias, por lo que tenemos que demostrar que somos más los priistas honestos, que traemos propuestas de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y apostamos cuando menos a mantener los municipios que hoy gobernamos porque tenemos una oferta política sólida", señaló Aguilar Yunes, representante priista en el OPLE.

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Crimen organizado, otro reto

Otro de los retos que enfrenta Yunes Linares es garantizar elecciones tranquilas en un estado en el que todos los actores reconocen la presencia y operación del crimen organizado.

En los primeros meses de gobierno, el gobierno panista ha enfrentado problemas de violencia en la entidad, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, señalan que de enero a marzo de este 2017 se han cometido 450 homicidios dolosos, mientras que en los mismos meses del 2016 ocurrieron 221.

El priista Aguilar Yunes señaló que la presencia del crimen se acentuó en el periodo más reciente y confió en que con los controles de fiscalización eviten la participación de candidatos vinculados con actividades delincuenciales.

"Hemos visto que el crimen se ha acentuado en el estado en últimas fechas, pero también hay controles que difícilmente permitirían hablar de narcocandidatos y en cuanto al desarrollo de las elecciones, históricamente han sido tranquilas, a eso le apostamos, a que haya condiciones de seguridad en el proceso", indicó.

El líder estatal del PRD, Jesús Velázquez, dijo que para nadie es ajena la presencia de grupos delictivos en la entidad, sin embargo, aseguró que no tienen identificados focos rojos.

"No hemos detectado, desde noviembre que inició el proceso electoral, zonas donde los problemas de violencia hagan que la gente no pueda salir a votar", apuntó.

En contraste Nueva Alianza y Morena coinciden en señalar que el crimen organizado tiene fuerte presencia en el norte y sur de la entidad.

"El ambiente en el estado de Veracruz no es tan favorable, sí hay focos rojos, por ejemplo en la Cuenca, igualmente en la parte norte del estado, como en Poza Rica, las cosas no están tan bien. Ojalá que en esos lugares en donde hay temor de participar, donde están esos grupos delincuenciales manifestándose, ojalá puedan ser controlados, sería lamentable que el día de las votaciones, como ya ha sucedido en otras contiendas, veamos camionetas con gente incluso armada, porque eso asusta al elector y muchos mejor deciden no votar y lo que hay que que vencer es el abstencionismo y ese es uno de los factores que lo propicia", refirió la lideresa de Panal, Mérida Mar.

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