10 independientes pelean gubernaturas, ponen a prueba el modelo 'Bronco'
Hay analistas que piensan que un par de botas y un sombrero no ganan elecciones, pero no hay duda de que la broncomanía ha sido objeto de deseo de varios candidatos independientes. Este año, 10 ciudadanos buscarán imitar la estrategia del ahora gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón El Bronco , y repetir una hazaña similar.
“Algunos candidatos piden el estilo Bronco”, reconoce Guillermo Memo Rentería, el hombre detrás de la campaña del expriista y exalcaldedel municipio de García, que califica sus campañas como “políticamente incorrectas” y que ahora asesora a independientes en varios entidades con elecciones.
Entre ellos está el expresidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y expresidente del consejo de administración de Aeroméxico, José Luis Chacho Barraza, quien tuvo que quitarse el saco y la corbata por recomenfación de Rentería.
“En este país las cosas van a cambiar, lo quieran o no, los quistes de la partidocracia”, dice Barraza en un spot en el que aparece en medio de un quirófano caracterizado como médico cirujano y afirmando que va a “extirpar” el cáncer de la corrupción.
En otros videos previos al arranque de campaña, aspirantes independientes en Aguascalientes, Zacatecas, Veracruz, Chihuahua, Tijuana, todos dirigidos por Memo Rentería, afirman “estar hasta la madre” de la corrupción y quieren “mandar a jubilar” a los partidos políticos. Incluso ya en plena campaña tienen su propia canción.
Lee: Solo en México: estos son los políticos que hacen campañas irreverentes
"Todo lo que huela a independiente es algo que no le va a gustar a la clase política No estoy esperando que haya otro Bronco en su forma, sino más "bronquitos" o "locos" que se atrevan a enfrentar al sistema", expresa Rentería.
Para este 5 de junio, aparecerán 10 nombres sin el sello de un partido político en las boletas de nueve estados de la República, luego de que la autoridad electoral de Puebla dio el visto bueno a la candidatura de la expanista Ana Teresa Aranda.
¿Verdaderos independientes?
La figura del candidato independiente tuvo su estreno en 2013, pero sólo fue posible en dos entidades: Zacatecas y Quintana Roo con un total de 23 planillas y un triunfo en el municipio de General Enrique Estrada, Zacatecas. El alcalde electo, Raúl de Luna, ya había gobernado la comunidad de 2007 a 2010 bajo las siglas del Partido Acción Nacional (PAN).
En 2015 destacaron las victorias sin partido de Manuel Clouthier, como diputado federal en Sinaloa; Pedro Kumamoto como legislador local en Jalisco; así como los triunfos de Alfonso Martínez, Alberto Méndez y César Valdez en municipios de Michoacán, Guanajuato y Nuevo León, respectivamente.
Todos ellos, salvo Kumamoto, ya tenían experiencia previa en la política o fueron militantes de partidos políticos.
Las elecciones 2016 serán la tercera vez en la que esta figura se pondrá a prueba en la arena electoral. Este año, “se espera algo parecido en números respecto a 2015, pero sin el folclor del Bronco”, considera el coordinador del área política del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Vidal Romero.
Para el politólogo por la Universidad de Stanford, la participación de Jaime Rodríguez hizo que se sobredimensionara la presencia de independientes. Sin embargo, afirma que la incursión de esta figura es positiva porque despierta el escrutinio de medios y ciudadanía, lo que debería llevar, progresivamente, a mejores gobiernos.
El consultor Gabriel Guerra Castellanos pone sobre la mesa tres cuestionamientos sobre los candidatos sin partido: ¿qué tan independientes son realmente?, ¿qué intereses representan y qué ideología tienen? y ¿con quién van a gobernar?.
El experto pone el ejemplo de El Bronco, quien, militó en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) por más de 30 años, y que, dice, hoy se rodea con gente de experiencia como Fernando Elizondo, como de personas con las que tiene un vínculo de negocios, así como representantes del viejo statu quo.
“Es un acto de ingenuidad pensar que no tiene vínculos con el poder establecido, la partidocracia y grandes poderes fácticos de Nuevo León”, afirma.
El investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Víctor Alarcón, observó que han sido disidentes de partidos políticos, que según su opinión tienen una forma menos difícil de movilizar apoyos, “quienes realmente han aprovechado esta nueva modalidad de participación”.
Por otro lado, de los 13 candidatos a gobernador no priistas, pero que aparecen en el padrón de militantes del PRI , cuatro de ellos son independientes: José Luis Barraza, Alejandro Campa, Francisco Frías y Rogelio Soto.
De los 10 que buscan gobernar su estado a través de la vía sin partido, solo cuatro de ellos no tienen experiencia política o de gobierno.
Una carrera de obstáculos
Tras el triunfo de Rodríguez Calderón hubo congresos estatales que reformaron sus leyes y aprobaron “candados” para frenar la creciente ola de independientes: aumentaron el porcentaje de firmas de respaldo que deben recolectar y acortaron el plazo para cumplirlas.
En otros casos también se instauraron plazos para renunciar a la militancia de un partido, antes de postularse a la candidatura ciudadana. Esto, para evitar que personas que no fueron elegidas como abanderados en la contienda interna de sus institutos políticos opten por este camino.
Con respecto a los recursos, los independientes tiene un modelo de financiamiento mixto, es decir, sus gastos de campaña son costeados con dinero público y privado.
Los partidos políticos tienen el 70% del tiempo oficial en radio y televisión, mientras que el 30% restante es dividido en partes iguales, de las cuales “hasta una de ellas podrá ser asignada a los candidatos independientes en su conjunto”, establece el artículo 41 de la Constitución Federal.
El exconsejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, opina que los políticos sin partido tienen la ventaja de competir bajo otra lógica. “La ventaja de un independiente es que no tener partido lo hace atractivo. Es mal argumento pensar que como no tiene el mismo financiamiento o acceso a medios está en desventaja”.
Además comenta que es un “engaño y demagogia” pensar que los ciudadanos que no son políticos “son buenos” y van a gobernar mejor. “Quien se lanza como candidato por definición es un político. La diferencia es qué tipo de político (quiere ser)”, dice el ahora director de la consultora Integralia.
¿Una candidatura independiente es la vía para diferenciarse de los políticos corruptos? Es una pregunta que Luis Carlos Ugalde deja abierta. “También hay independientes oportunistas, como políticos con partido. Pero es buena noticia que haya un canal de participación sin partidos que pueda enriquecer la vida política”.
*Este reportaje fue publicado en la edición 1187 de la revista Expansión