Con el cambio se busca financiar la nueva estrategia de salud que aplica el gobierno federal, luego de que desapareciera el Seguro Popular y luego fracasara y se extinguiera también el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi).
La oposición rechazó las reformas pues la reforma no se hizo tras un análisis más profundo que pasara por la comparecencia del director del IMSS, Zoé Robledo, para explicar los cambios y las garantías de que el nuevo sistema tiene bases para funcionar, además de que el asunto se propuso de forma apresurada y sin tiempo para el análisis.
Con la decisión las entidades que suscriban convenios con la Federación y le hayan transferido sus plazas y plantillas del personal serán las que acepten que ésta se quede con sus recursos destinados para la salud, pero el FASA subsistirá para los estados que no suscriban los convenios respectivos.
El senador de Acción Nacional (PAN), Damián Zepeda, advirtió que sin planeación, se pondrá en riesgo, ahora, los sistemas locales de salud.
“Esta reforma lo que hace es agarrar el dinero de los estados, el que tienen para salud y quedárselos. Y dice como se los voy a dar (el servicio de salud) te quito tu dinero. ¡Pero no es dinero de la Federación¡. La Ley de Coordinación Fiscal administra dinero que es de los estados porque los estados le entregaron a la Federación la facultad de cobrar impuestos, ISR, IVA y se les regresa mediante una fórmula”, explicó.
Por eso hay un fondo para salud, otro para educación, otro para infraestructura “y bien a gusto, la Federación dice si yo me voy a encargar te quito el dinero” y agregó el panista, apenas puede el IMSS prestar servicios para la población asegurada y ahora cargará con millones de mexicanos más, por lo que no se dará abasto.
Cuando este gobierno inició habia 20 millones de personas sin ningun servicio de salud y ahora son 50 millones, “ni IMSS, ni ISSSTE, ni seguro privado, ninguno y ya no hablar de servicios de calidad. Ante esa crisis el gobierno ha intentado cubrirla, primero desapareció el Seguro Popular. Inventaron el Insabi, fracasó y ahí creció de 20 a 35 y ahora 50 millones de mexicanos sin servicios de salud”.
“Ahora quiere corregir con el IMSS Bienestar, hagámoslo bien, que venga el director del IMSS y explique... pero si no puede dar ni un servicio adecuado a los que están en el IMSS que pagan ¿cómo le van a dar servicio a los que no están, sumar 50 millones de mexicanos? Si apenas le alcanza para los que ya están en el IMSS¡”, reclamó el panista.
El senador Luis David Ortiz Salinas, de Movimiento Ciudadano (MC), que gobierna Jalisco y Nuevo León, lamentó el desaseo con el que se dictaminó y aprobó el asunto, lo que afectaría a los sistemas de Salud de esas dos entidades, que han mejorado he impulsado el crecimiento de sus sistemas de salud.
Este es -acusó- un modelo centralista que atenta contra la federalización del Sistema de Salud, “derivando en un desastre a nivel nacional como se dio al momento de que en 2019 cuando se eliminó el Seguro Popular”, alertó.
“El actual gobierno no tiene claro que es federalizar, porque busca la centralización de programas, de presupuesto y dejando sin mecanismos a las entidades federativas por si mismas atiendan las necesidades de la población”, lamentó.
