Colonias como Cuauhtémoc, Juárez, Roma, parte de la Condesa y vialidades como circuito interior y avenida Chapultepec se convirtieron en enormes estacionamientos de autobuses que trasladaron a miles de personas de otras entidades del país para participar en la marcha convocada por el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador.
Autobuses de distintas líneas, de servicio turístico, unidades de transporte público y concesionado de todos los estados del país, las 16 alcaldías de la Ciudad de México y área metropolitana, arribaron a las inmediaciones del Paseo de la Reforma para acercar a los militantes de Morena y simpatizantes del presidente López Obrador.
Sobre la avenida Sevilla, autobuses provenientes de Coahuila cerraron la vialidad desde la calle Durango, ya que algunos hicieron hasta doble fila para dejar a los asistentes a la marcha, quienes se colocaron sobre la vialidad con pancartas en la que además mostraban su apoyo al subsecretario de seguridad Ricardo Mejía Berdeja, aspirante al gobierno de esa entidad.
“Ricardo Mejia, Coahuila en ti confía” coreaban sus simpatizantes.
Algunos autobuses, además de trasladar en sus cajuelas las maletas de los asistentes, traían enormes rollos de cartulinas, algunas con leyendas de apoyo a la reforma electoral, las cuales eran repartidas entre los asistentes, así como banderas de Morena y de los políticos a los que apoyan.
Algunos autobuses iban acompañados de camionetas particulares que trasladaban al responsable del grupo y el alimento para los asistentes, en algunos puntos se ofrecía tortas, tamales, atoles, sándwich, con una fruta, un jugo y una palanqueta o barra de alegría.
La lateral de Circuito Interior, entre la avenida Constituyentes y el Eje 2 poniente, fue completamente cerrada para el estacionamiento de decenas de autobuses.