El funcionario recordó que el viernes pasado el Consejo General del INE ajustó su presupuesto 2022 para absorber el recorte aprobado por la Cámara de Diputados, por 4,913 millones de pesos en su gasto.
Aún con las adecuaciones, el INE enfrenta un déficit para cumplir con el proceso de revocación de mandato, donde se necesitan instalar más de 161 mil casillas. como las que se operaron en las elecciones federales de junio pasado.
Ese monto es insuficiente –recalcó el consejero presidente del INE– pues la revocación implicará un gasto de al menos 3,800 millones de pesos.
Con los ajustes del viernes pasado, el INE contará con una bolsa de 1,503 millones de pesos para la eventual realización de este ejercicio, pues se aprobó la liberación de los recursos del orden de 445.4 millones de pesos, resultado de cancelar la construcción de la Junta Local del INE en Colima, según el instituto.
Además, se hizo un compromiso de ahorros de 227.1 millones de pesos y se agregarán a la organización del eventual ejercicio revocatorio más de 830.5 millones, recursos que la Cámara autorizó para una eventual consulta popular en 2022.
De acuerdo con Lorenzo Córdova, aún con esas adecuaciones “el boquete presupuestal" que enfrenta el intituto es de 2 mil 300 millones de pesos. Por ello, el funcionario dijo que se decidió acudir ante la Corte para que defina cómo debe avanzar el INE en el proceso de revocación de mandato o si deben entregarse los recursos que se necesitan.