Y 12 tatuajes después, el 'Mijis' convirtió al 'chico banda' en diputado

Usa el cabello tan corto que se pueden sentir las cicatrices de los machetazos que le dieron en aquella 'campal' con un grupo rival. Otra marca baja justo en medio de su abdomen y le deforma el ombligo. También tiene huellas de los ‘tiros’ que recibió en las manos, los brazos y hasta la cara.

Tenía 12 años cuando entró al mundo de las pandillas. A los 17 nació su primer hijo. A los 28, tras la muerte de su madre, pasó por cinco intentos de suicidio. Sin embargo, se alejó de la violencia luego de que balearan y apuñalaran a su hijo adolescente. Ahora, con 39 años, Pedro Carrizales rendirá protesta como diputado local de San Luis Potosí.

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Desde que ganó el pasado 1 de julio, su rostro, sus tatuajes, su alias y su pasado como líder pandillero convirtieron al ‘Mijis’ en uno de los personajes más conocidos de la elección 2018, pero también en el más discriminado públicamente.

“Yo leo, escucho, escucho las noticias. Estoy informado. No porque sea de barrio, me crea ignorante la gente. Yo sabía que no ha habido un chavo banda de barrio que haya sido diputado. Yo sabía que iba a ser una nota (…), pero llegar al grado a donde llegó”, dice en entrevista con ADNPolítico, desde una vivienda ubicada en Ciudad 2000, considerada un foco rojo de inseguridad en la delegación Villa de Pozos.

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Pintando tu cantón

Una lona con su rostro junto al de Andrés Manuel López Obrador y los emblemas de la coalición Juntos Haremos Historia identifica el lugar: el último de seis pequeños departamentos repartidos en los tres pisos del edificio, idéntico a otros dos construidos a lado. Es una colonia popular, pero a diferencia de otras calles cercanas no hay graffittis, al contrario, todo luce recién pintado.

Esa estética, presume el diputado electo, se debe a la labor de los 'chavos banda' que ‘rescató’ con su programa ‘Pintando tu cantón’, con el que da empleo temporal a pandilleros a quienes pretende rescatar de la violencia y las adicciones.

“Ha sido un éxito (...) Haz de cuenta que la gente nos da 250 pesos. La pintura yo la conseguía, en ese tiempo, por el municipio y por gente acá. Entonces, la pintura regalada, todas las doñitas querían que les pintáramos su casa y por eso fue un éxito. Y lo sigue siendo, lo sigo aplicando aquí, en Saltillo, en varios lados”, dice.

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Reinserción y policía de barrio

Con más de 24,000 votos, Carrizales Becerra ganó la diputación local por el Distrito II, que lo mismo abarca zonas residenciales que colonias conflictivas como la suya. A ese triunfo le dedicará su décimo tercer tatuaje: la frase ‘Les ganamos’, pero también su trabajo en el Congreso, promete.

Impulsará el presupuesto ciudadano para ‘amarrar las manos a los municipios’, un exhorto al gobernador Juan Manuel Carreras, del PRI, para que promueva campañas anti-discriminación y una especie de amnistía a nivel estatal.

“Que quiten los antecedentes penales en delitos menores. O sea, porque estamos en la universidad del mal (...) No hay una reinserción. La neta el penal es la universidad del mal, ahí conoces de todo calibre; entonces, si usted le da antecedentes penales a una persona que cayó por hambre, porque, de verdad, aquí literalmente hay gente que cayó por robarse mandado. Aquí no es La Rosa de Guadalupe”, explica.

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Él mismo, asegura, casi fue víctima de antecedentes penales fabricados, cuando lo acusaron de haber baleado a cuatro personas. Nunca piso el penal porque en realidad no hubo balacera ni víctimas –al menos ninguna donde él hubiera participado-, no se presentó un certificado médico y la prueba de rodizonato dio negativo a pólvora en sus manos.

“Aquí en este lugar ha habido como 14 homicidios en menos de dos meses, de pandillas”, asegura.

Por eso también prepara una propuesta para crear la policía de barrio, capacitar a los uniformados en el manejo de las emociones, escucha activa y mediación del conflicto para que puedan hablar con una pandilla y con otra.

"Que (la policía) sea capaz de mediar entre una pandilla y otra para evitar el conflicto y, a la vez, pueda hablar con los vecinos, que los vecinos tengan esa confianza que pueden hablar con el policía ‘Juan’ o ‘Abraham’”, menciona.

Contra la discriminación

A dos semanas de la elección, ‘El Mijis’, o ‘El Bebé’, como también lo apodan, no solo ha enfrentado discriminación por su origen, su aspecto y su supuesto pasado delictivo. También se le ha cuestionado su falta de preparación profesional y experiencia en la política.

Sin embargo, él pretende remediar las críticas estudiando Derecho y contratando a jóvenes académicos como asesores. Sobre lo segundo, responde que no es un improvisado.

“Yo sé que (López) Obrador influyó en muchas elecciones, en la elección a mí también me ha de haber ayudado, pero también sé que mi trabajo habla porque, cuando me inscribí como independiente, yo me moví”, sentencia.

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Sus inicios en la política

Su carrera política comenzó sin querer. Tras dejar la vida de pandillero, pero sin abandonar a ‘la banda’, Carrizales aprendió a intercambiar gestiones por trabajo para el PRD y el PRI. El sol azteca, asegura, aprovechó su capacidad de movilización y organización en manifestaciones e incluso le pidió movilizar votos en una elección interna del tricolor.

“Yo apoyé a la FAO (Frente Amplio Opositor), yo era el brazo armado, como quien dice, de eso. Era la forma como yo contribuía con las gestiones que me ayudaban a hacer los regidores”, cuenta y explica:

“Empiezo a ver que puedo utilizar a los políticos y utilizar la política para ayudar a la banda, ahora sí que para llevar apoyo (...) Empiezo a ser como un vínculo gestor de la raza, de la banda con el municipio y a partir de ahí empiezo a ver que puedo hacer más”.

Después trabajó para Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano) y a ese partido sí se afilió. Pero sus proyectos en el activismo le demandaron más tiempo y llamaron la atención de los medios de comunicación, de otras organizaciones y actores sociales extranjeros.

Fuera de la política, Pedro encontró que era difícil hacer activismo y que sus programas fueran reconocidos como tal. Así que se constituyó como asociación civil y comenzó a emprender proyectos sociales con empresas particulares.

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De independiente a Juntos Haremos Historia

Tras años alejado de la política, relata, en 2017 pensó en volver a ella para “ir más pa' allá” con sus proyectos, que ahora abarcan varios estados en México y se han presentado en países de Europa y Asia. Entonces se registró como independiente y, antes de iniciar la recabación de firmas, ya tenía apoyo de 3,500 personas.

“Me empiezan a hacer invitaciones varios partidos porque vieron (...) y saben lo que representamos. Entonces, me hablan de varios: los azules, los amarillos y no quise porque aparte traer esa marca está canijo y va contra mis ideales. Y entonces me hablan del PT y Morena y coalición, viajo a México a una convención nacional y me hacen la invitación de que sea su candidato”, resume.

Como se identificaba más con esa plataforma, solo les puso una condición: “a mí déjenme ser autónomo, hacer mis iniciativas y yo me voy con ustedes”.

‘El Mijis’ reconoce que en el futuro le gustaría buscar la diputación federal, pero sabe que antes tiene todo que demostrar en el Congreso de San Luis, a donde se dice ansioso por llegar. Desde ahí, quiere impulsar iniciativas con visión de Derechos Humanos.

Con su trabajo, asegura, quiere demostrar a quienes lo discriminan por sus tatuajes, su origen o su pasado que así como representa a los chavos banda, también puede representarlos a ellos:

“Pretendemos hacer esas iniciativas, pero no nomás estar ahí, sino salir. Porque las iniciativas no salen estando atrás de un escritorio, salen de las necesidades, de lo que tú ves (...) Pretendo estar en el Congreso como si fuera una fábrica, todos nos ayudamos: ayudamos al que nos puso ahí, al empresario a que le vaya bien, pero también a los que están atrás”.

- ¿Qué vas a hacer con el sueldo de diputado?

“Yo siento que muchos ahorita se quieren colgar de eso: las bancadas, que el dinero se va donar… Pero ahí no sé si pueda haber corrupción u otro manejo (...) Yo con ese recurso pretendo (...) Poner un taller masivo, grande y hacer un convenio con las empresas: que, por ejemplo, el municipio les dé permiso para obra: sobres, te voy a dar el permiso de obra, pero contrata a 15 chavos banda. Y a ver: ahí te van plomeros, ahí te van electricistas. No se necesita dinero, nomás creatividad”, propone, entre otras alternativas.

Además, promete hacer algo que el gobierno, acusa, nunca hace en lugares como Ciudad 2000:

“Nunca vienen al barrio y le preguntan a la gente qué es lo que necesitan o a los chavos banda: les ponen una cancha de fut y los vatos quieren jugar básquet”.

Como diputado, afirma, quiere hacer lo mismo que como activista: visibilizar a los chavos banda. En grupos como esas culturas urbanas, dice, “se pueden evitar los futuros maltratos a la mujer, los robos, los asaltos… contribuir a una cultura de paz”.

Sus programas y proyectos como activista:

• Pintando tu cantón: empleo temporal para chavos banda
• Un grito de existencia: caravanas para compartir experiencias de vida y rehabilitar a chavos banda
• Chavos banda unidos por una comunidad limpia, segura y sin violencia (en colaboración con la empresa Cummings): educación, deporte, ecología, empleo temporal y pacto de civilidad
• Caravana por la Paz: recorrido por colonias con problemas de pandillas para hacer pactos de civilidad
• Colaboración con familias de desaparecidos (proyecto): “El convenio es ese: que los chavas banda exhumen los cuerpos y le ayuden a las mamás. ¿Para qué quiero hacer esto? Para que el chavo banda vea el sufrimiento que causa cuando toma malas decisiones, cuando le hacen la invitación para ser sicario. Que vea el sufrimiento de las madres, el ir a sacar unos huesos que se conforma con ir a llorarle a un lado”.