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Morena pone condiciones a la legitimidad del triunfo del PAN en Puebla

El excandidato morenista, Miguel Barbosa, dijo que la panista Martha Erika Alonso podrá legitimarse si decide investigar la gestión de su esposo, Rafael Moreno Valle.
lun 10 diciembre 2018 07:47 PM
Miguel Barbosa
Opositor. El morenista dijo que buscará generar un contrapeso al gobierno que Alonso iniciará el 14 de diciembre.

PUEBLA, Puebla (ADNPolítico).- El partido Morena condicionó este lunes la legitimidad del triunfo del PAN en la elección para el gobierno de Puebla, al señalar que quien fue su candidata y ahora es gobernadora electa, Martha Erika Alonso, solamente podrá legitimarse si investiga las posibles irregularidades en la gestión de su esposo, el también panista Rafael Moreno Valle.

Lo anterior fue expuesto por el excandidato morenista, Miguel Barbosa, quien encabezó una rueda de prensa dos días después de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificó la victoria del PAN y, en una votación dividida, determinó que no había pruebas suficientes para anular los comicios, como querían los morenistas.

“Si Martha Erika quiere legitimarse después de ser ratificada por un tribunal, a quien tiene que investigar es a Rafael Moreno Valle”, dijo, acompañado de presidentes municipales y legisladores locales y federales de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PES).

El fin de semana, tras el fallo del TEPJF, Barbosa acusó que hubo “presiones” del PAN y de Moreno Valle, cuyo gobierno abarcó de 2011 a 2017, para que los magistrados resolvieran en favor de Alonso. Para el morenista, la situación catapulta las aspiraciones presidenciales de Moreno Valle hacia 2024.

Durante la rueda de prensa de este lunes, Barbosa también anunció que el próximo domingo dará a conocer un plan de acción para generar contrapesos frente a la administración de Alonso, que inicia este 14 de diciembre.

El bloque Morena-PT-PES exige que la próxima gobernadora reconozca que el estado tiene una deuda pública de 100,000 millones de pesos, según sus cálculos, y que no vete las reformas que apruebe el Congreso local, como lo ha hecho la gestión del mandatario saliente, Antonio Gali.

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