Entre finales de abril y el 13 de junio, la alcaldía Álvaro Obregón retiró más de 350 toneladas de basura y desechos sólidos acumulados en presas y barrancas de la demarcación.
Aunque la medida fue para prevenir afectaciones durante la temporada de lluvias, las precipitaciones recientes arrastraron nuevos residuos y provocaron el riesgo de desbordamiento en la presa San Francisco, también conocida como presa Becerra.
La acumulación de basura en las tres presas de la alcaldía Álvaro Obregón, que proviene de las zonas altas y de las 13 barrancas, dificulta el desfogue de agua en estos cuerpos hídricos y eleva el riesgo de desbordamientos y afectaciones a la población.
De acuerdo con la dirección general de Servicios Urbanos de la alcaldía, hasta hace unos días cuadrillas conformadas por más de 50 trabajadores realizaron limpieza en las 13 barrancas de la demarcación, algunas de las cuales colindan con las presas Anzaldo, Tacubaya y Becerra.
En este periodo fueron retirados más de 750 metros cúbicos de desechos sólidos de las barrancas y presas. Al problema de la basura se suma también la acumulación de cascajo: la autoridad ya retiró en el periodo referido casi 90 toneladas de desechos de construcciones.
Tras las fuertes lluvias registradas en las últimas horas y el pronóstico de más precipitaciones para lo que resta de la semana, autoridades de la Ciudad de México y de la alcaldía Álvaro Obregón encendieron las alarmas.
José Mario Esparza, secretario de Gestión Integral del Agua, explicó en conferencia de prensa que, pese a las acciones preventivas para el retiro de residuos en las presas de Álvaro Obregón desde semanas atrás, un tapón de 10 toneladas de basura provoca el riesgo de desbordamiento en la Presa Becerra, en la zona de Barrancas de esta demarcación.
El funcionario consideró que la acumulación de basura en este cuerpo de agua no solo representa un foco de infección, también riesgos a las personas que viven en las zonas aledañas a la presa y a las barrancas.
Agregó que la Presa Becerra tiene una capacidad de 100,000 metros cúbicos de agua y se llegó al 80% de su capacidad por los obstáculos para el desfogue de liquido, debido a la cantidad de residuos sólidos.
“Hacemos un llamado a la población, que nos ayude a ser muy responsable con el depósito de la basura en los lugares correctos. No depositar la basura en la vía pública.” apuntó.
La Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México contempla en su artículo 29 los supuestos en los que una persona puede ser sancionada por arrojar basura, muebles, animales muertos u otro tipo de desechos tanto en la vía pública, como en barrancas o cuerpos de agua.
Las sanciones por tirar basura o animales muertos van de 11 a 40 Unidades de Medida y Actualización (UMAs), es decir, de los 1,244.54 pesos a los 4,525.60 pesos; arresto de 13 a 24 horas o de seis a 12 horas de trabajo comunitario.
En el caso del cascajo, el Código Penal de la Ciudad de México contempla penas de hasta cinco años de prisión por el depósito de materiales de construcción en sitios no autorizados.
