Con cacerolazos, organizaciones y activistas se vivió el aniversario 78 de la Plaza de Toros México, en medio de la batalla legal por la tauromaquia en la Ciudad de México.
“¡Toros sí, toreros no!” y “¡asesinos, asesinos!”, gritaron los manifestantes en la segunda protesta desde que se reanudaron las corridas de toros en el recinto, luego de que una decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tiró abajo la suspensión dictada por un juez que impedía esta práctica desde junio de 2022.
Los anti-taurinos fueron recibidos por vallas contratadas por la Plaza México, así como un dispositivo con 500 policías implementado por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) capitalina.
Esto en respuesta a la primera manifestación del 28 de enero, cuando algunos manifestantes realizaron pintas y daños en la fachada de la plaza, además de agresiones en contra de los asistentes a la plaza, contra quienes algunos protestantes arrojaron piedras y otros objetos.
Pese a la presencia de manifestantes, los asistentes pudieron ingresar a la plaza y las corridas al interior de la Plaza México se desarrollaron como estaban programadas.
Tras casi dos horas de protesta, los inconformes comenzaron a retirarse a alrededor de las 17:00 horas, sin que las autoridades reportaran personas detenidas o heridas.
Por la mañana, activistas se reunieron en el Monumento a la Revolución con el objetivo de reunir 35,000 firmas en contra de las corridas de toro y presentarlas ante la Suprema Corte a favor de la prohibición de la tauromaquia.
Mientras tanto, está pendiente de resolverse de forma definitiva el amparo interpuesto por la organización Justicia Justa en 2022, así como un segundo amparo presentado por la organización Todas y Todos por los Toros, que sigue en curso pese a que la suspensión temporal fue revocada ante la queja presentada por los dueños de la Plaza México.